"Es de vital importancia apostar a la profundización de este modelo", sostuvo Abal Medina

En su informe ante el Senado, el Jefe de Gabinete volvió a rechazar las presiones de las corporaciones para forzar una devaluación. Aseguró que se mantendrá una evolución de la moneda tranquila para preservar la competitividad. Este debe ser "el comienzo de otra década", dijo.
El jefe de Gabinete, Juan Manuel Abal Medina, aportó esta tarde ante el Senado los datos de lo que consideró una “década ganada” gracias al “éxito de las políticas que tomó la presidenta Cristina Fernández de Kirchner y a las importantísimas leyes votadas desde el Congreso” ,que permitieron que “la crisis internacional  impactara muy poco en el desempeño económico y social” del país.

El funcionario estimó que los números del crecimiento económico y social de la Argentina y en particular el de las exportaciones de manufacturas “demuestran la falsedad del argumento del ‘viento de cola’,  ya que el país no tuvo ningún beneficio externo en materia de precios sino que creció en cantidad" de exportaciones, aún "soportando una competencia internacional”.
“Vivimos una permanente presión de las corporaciones para forzar una devaluación a toda costa,  que significaría un aumento de las ganancias de los importadores de materia prima y de algunos grupos industriales y una caída notable de ganancias de los pequeños y medianos empresarios, y sobre todo del salario de los trabajadores”, advirtió.
En ese sentido, afirmó Abal Medina que “como gobierno debemos defender el interés general y por eso  hoy defendemos el poder adquisitivo de los argentinos, controlando y sosteniendo el mercado y la evolución de la moneda tranquila, para preservar la competitividad”.
Al cierre de su informe y antes de responder a las preguntas de los senadores, el Jefe de Gabinete aseguró que no estaba dispuesto a participar de un “culebrón político” y denunció que la Presidenta y su antecesor, Néstor Kirchner, “sufren una asquerosa y despiadada campaña de desprestigio” . “Todos tenemos que pararnos a defender la patria, la democracia, la política y todos los avances que hemos conseguido”, advirtió.
“Nuestra Presidenta –recordó- nos desafió a que éste no sea el final de una década, sino el comienzo de una segunda década de crecimiento sin precedentes en la historia,  y debemos estar a la altura de las circunstancias porque el pueblo argentino así lo demanda”.
Abal Medina confesó: "Desconfío fuertemente de todos los que hoy se presentan como acérrimos defensores de la República, pero aguardan agazapados para hacer de lo público un botín de las corporaciones”.
También acusó al “coro de medios hegemónicos, profetas del fracaso, que auguran el final de un ciclo” y se preguntó “¿de qué final están hablando? ¿de un gobierno o de un ciclo de crecimiento con inclusión social?” y agregó: “¿Será acaso que estos agoreros pretenden frustrar el entusiasmo de miles de jóvenes que con diversas banderas se incorporan a la política?”.
Al iniciar su exposición, afirmó que “creo que todos honestamente, deben coincidir en que todas las políticas que se vienen tomando, cada proyecto, cada ley, cada decreto, cada resolución, han apuntado siempre a garantizar el mayor desarrollo con mayor igualdad social, y esto es lo que hemos logrado a pesar de que estamos atravesando la peor crisis internacional”.
Afirmó que “hoy la economía argentina da claros síntomas de seguir progresando” y puso como ejemplo que “a lo largo del primer trimestre del año ha crecido el desempeño de la economía, con récord de recaudación histórica y el nivel más alto de transferencias automáticas a las provincias, así como el aumento de la actividad industrial y el mantenimiento del superávit fiscal y comercial”.
Entre las cifras de crecimiento que enumeró, destacó que el Producto Bruto Interno (PBI) “ha crecido en diez años 99,1 por ciento, prácticamente ha duplicado la riqueza y la producción de los argentinos” en la última década.
Apuntó que “la participación de asalariados en el PBI ha crecido el 34,3 por ciento” en los últimos diez años y que el número de trabajadores registrados creció “de 4,9 millones en el 2003  a 9,1 millones en el 2012”.
También afirmó que “el salario mínimo vital y móvil pasó de 200 pesos en el 2003 a 2.875 en este año”.
“La desocupación –siguió- que en el 2003 era del 24,3 por ciento, bajó al 7,9 por ciento en el primer trimestre de este año”.
Afirmó que la actividad económica, “en el primer trimestre de este año creció un 2,7 por ciento y venimos sosteniendo un promedio del 4,4 por ciento de crecimiento para el 2013, incluso superior al previsto en el presupuesto”.
Señaló que la deuda pública hoy representa el 42 por ciento del PBI cuando en el 2003 era del 166 por ciento del PBI.
La deuda pública externa con privados, dijo, es hoy de cerca del 9 por ciento del PBI, cuando en el 2003 ascendía al 96 por ciento.
Dijo que en el año  2012 se pagaron 13 mil millones de dólares de deuda y que “seguimos honrando los compromisos para seguir este año pagos de deuda por 5.833 millones de dólares”.
También aseguró que existe un “elevado nivel de reservas gracias a superávit comercial con entrada de dólares a economía nacional, que pasaron del 2003 de 11.048 millones dólares a ayer a 385.72 millones, lo que significó un aumento de 249 por ciento en una década”.
También señaló que creció el perfil exportador de las industrias que alcanzó en los últimos diez años un crecimiento del 34 por ciento.
Dijo que el nivel de inversión creció a un promedio anual del 13,6 por ciento.
Destacó que “la recaudación mejora año a año sin aumento de impuestos” y que “en los primeros 5 meses del 2013 creció un 28,3 por ciento, en tanto el total de lo coparticipado fue un 32,2 por ciento superior a lo que se distribuyó el año pasado y más alto que lo presupuestado”.
Consideró Abal Medina que “es de vital importancia apostar a la profundización  de este modelo para superar las dificultades históricas del país” por lo cual el “gobierno sostiene polítics de largo plazo”.
“Sabemos bien –destacó- que un futuro sostenible puede construirse con la inclusión de los más postergados, y por eso la década gnada se traduce en la reconstrucción de la red social” del país.