Las elecciones en el Partido Justicialista generaron diferencias entre los dirigentes del Frente Renovador.

  Por Nicolás Farache

En Almirante Brown se está viviendo una especie de situación cuasi lisérgica. Dario Giustozzi ha tomado la decisión de volver a presentar una lista para pelear la conducción del Partido Justicialista de cara a las elecciones del próximo 15 de diciembre, aun cuando todos los candidatos de la lista de su partido, el Frente Renovador, fueron inhibidos para participar. Sin embargo, esta situación paradójica cobra dimensiones mayores al encontrar que deja el cargo del ejecutivo distrital a un radical, Daniel Boletieri... Como si esto fuera poco, continuarán como pilares de su gestión el concejal Mario Fuentes y el secretario de gobierno José Fernandez, ¡también radicales!
Pero volvamos a la actualidad. El todavía intendente de Brown decidió presentar la candidatura al PJ de su secretaria privada, Leila Lasota. Por lo visto no le quedaban muchas opciones entre sus principales cuadros que no fueran radicales.
A esta coyuntura que tristemente linda con la comedia se suma la cobarde actitud de Sergio Massa, quien no quiere ver diluida su victoria en las legislativas de octubre ante una eventual derrota dentro del partido en diciembre. Aunque esto le genere fricciones dentro de un Frente Renovador que día a día presenta ejemplos de un creciente malestar interno. Malestar que se profundizó cuando el intendente de Malvinas Argentinas, Jesús Cariglino, no recibió apoyo de su colega de Tigre para disputar el PJ.