Capitanich afirmó que el pago de la deuda con reservas es una política virtuosa

El Jefe de Gabinete, Jorge Capitanich, advirtió que de no haberse pagado la deuda externa con reservas del Banco Central, la Argentina tendría hoy más deuda, con tasas usurarias. Con el pago de la deuda se pudo generar una política con autonomía, que privilegia el empleo.
El Jefe de Gabinete, Jorge Capitanich,  afirmó hoy que con el pago de la deuda externa con reservas del Banco Central de la República Argentina (BCRA)  “se evitó un endeudamiento adicional y se evitaron tasas usurarias” y, además, con el pago se generó una política con autonomía, que privilegia el empleo y las inversiones. En la habitual conferencia de prensa esta mañana en la Casa de Gobierno  Capitanich dijo que el tema de las reservas forma parte de la agenda de muchos medios de comunicación y, por ello,  brindó algunas cifras significativas.
Sostuvo que si la Argentina no hubiese pagado su deuda externa el nivel de reservas del Banco Central de la República Argentina (BCRA) sería hoy de 73 mil millones de dólares.
Además recordó que durante la Convertibilidad, en los ’90,  las reservas del BCRA eran en promedio de 21.940 millones de dólares y reiteró la cifra: 21.940, señalando que en aquel momento había una política monetaria pasiva y regía la convertibilidad del peso con el dólar.
Actualmente las reservas promedio son de 36.983 millones de dólares, dijo y recordó que casi 43 millones se utilizaron para pagar deuda, no contraída por el actual gobierno y seguidamente se preguntó: ¿cuáles eran las opciones que tenía el país?: generar imposición financiera del volumen de reservas.  Si no hubiésemos pagado deuda, hoy tendrá 73 mil millones de dólares” subrayó.
A su vez explicó que por esas reservas el mercado internacional  hubiese pagado 0,25% de interés y agregó que si la Argentina, como muchos pretenden, hubiese tomado deuda, tendría que haber pagado por los servicios de capital e intereses hasta un 20% de la deuda, lo que hubiese costado entre 5000 y 6000 millones de dólares más. “Tendríamos más deuda si no hubiésemos podido cancelar con la acumulación de reservas”, advirtió Capitanich.
Ello, agregó fue una política virtuosa del ex presidente Néstor Kirchner a partir de generar una política anti cíclica; vendemos más, exportamos más al exterior respecto de lo que compramos, lo que da un saldo favorable de la balanza comercial. Con la acumulación de reservas se pagan los compromisos contraídos, por otros gobiernos,  al tiempo que se brinda incentivos a la producción, el empleo,  y se logró el saldo positivo de la balanza comercial. “No se contrajo más deuda a tasas usurarias”, destacó.
Advirtió además que la Argentina no tiene buena prensa internacional “porque la usura internacional castiga a los países que tienen ejercicio de su soberanía; quieren que se endeude a altas tasas, pero la Argentina  ha tenido autonomía y cancelado sus deudas”, afirmó.
Recordó que cuando Kirchner decidió cancelar la deuda, la oposición en el Congreso decía que era una irresponsabilidad, porque nos íbamos a quedar sin reservas. Por el contrario, después del pago, las reservas crecieron, dijo.
Cadenas de valor
Asimismo el jefe de Gabinete dijo que "para el 15 de febrero" el Gobierno quiere "tener todas las cadenas de valor analizadas para llegar al consumidor con buenos precios", al detallar los encuentros que mantuvieron las autoridades esta semana y los que tendrán a futuro con diferentes sectores.
En conferencia de prensa en Casa de Gobierno, agregó: "Además queremos impulsar las economías regionales y por eso nos reuniremos con sectores que van desde la cadena cárnica hasta peras y manzanas".
Ayer, con el gobernador de Misiones, Maurice Closs, se analizó la situación de la yerba mate, reveló Capitanich, quien anunció para hoy un encuentro con sectores de la cadena cárnica, en particular avícola y porcina.
"Sólo en el sector porcino hay 33 mil puestos registrados con un incremento del 157 por ciento y una producción de casi 4,7 millones de cabezas", detalló el jefe de ministros.
Contó que el consumo de este tipo de carnes se incrementó "un 90 por ciento entre 2003 y 2013" y también "avanzó la sustitución de importaciones" por lo que seguirán trabajando en "incentivos" para profundizar la sustitución.
"Lo mismo sucede con la producción avícola que creció 135 por ciento, las exportaciones alcanzaron a 643 millones de dólares, y Argentina se ubica en los primeros lugares a nivel mundial con una suba de la producción de más del 1000 por ciento, con 362 mil toneladas y un consumo que pasó de 18 a más de 40 kilos", enumeró.
Por otra parte, Capitanich precisó que el Gobierno seguirá trabajando para lograr "precios estables para el consumidor" y advirtió que en los "segmentos donde exista posición dominante o concentración de mercado, también daremos participación al Tribunal de Defensa de la Competencia".   
Agro
Por otra parte destacó los niveles de rentabilidad del sector agropecuario y ratificó la aplicación de retenciones a la exportación de granos, para que parte de la renta excedente de los productores rurales "se vuelque a un proceso de industrialización acelerada".
Capitanich atribuyó recientes críticas de dirigentes agropecuarios a que "cada tanto determinado tipo de instituciones establece una estrategia de visibilidad, con declaraciones grandilocuentes respecto a las políticas públicas del gobierno".
Luego difundió diversos parámetros sobre la sostenida rentabilidad del sector.   En la década del 90, recordó, la superficie sembrada era equivalente a 20 millones de hectáreas y hoy llega a 32 millones. "No creo que ninguna actividad crezca mientras no tenga la rentabilidad suficiente para crecer", afirmó.
Agregó que el valor por hectárea "se ha incrementado de una manera extraordinaria, tres, cuatro, cinco, seis veces, según zonas, áreas geográficas y cultivos. No creo en ningún modo que el precio por hectárea crezca si efectivamente no hay rentabilidad", insistió Capitanich.
Mencionó luego el "muy significativo" paquete tecnológico incorporado en la producción, que incrementó los rendimientos, lo que se tradujo desde 2002 en "un alza sustancial del volumen de toneladas de cereales y oleaginosas".
Capitanich recordó que cuando Lucio Reca era secretario de Agricultura del ex presidente Raúl Alfonsín, las metas eran de 40 millones de toneladas, mientras "esta temporada podemos superar los 105 millones", en dependencia de la tecnología, el clima y otras variables.
Dijo además que los derechos de exportación sirven para disminuir el precio de los bienes internamente, lo cual permite que ese bien no se venda en forma primaria al exterior, sino que se procese en el país.
El menor precio para la industria -explicó- alienta un mayor valor agregado, sustituir importaciones, dar más empleo, mejorar la recaudación fiscal, generar inversiones para bajar el costo de energía y aumentar el volumen de exportación a menor precio.
Capitanich evaluó que los cuestionamientos del agro pueden tener "motivaciones políticas" y resaltó que las entidades del campo "pedían la apertura del cupo de exportación de trigo, se hizo y se quejaron después. Estamos trabajando para que la Argentina pueda cumplir las metas que se fijaron en el Plan Estratégico Agropecuario 2020", dijo y mencionó como ejemplos las reuniones de las cadenas de carnes, de producción de  peras y manzanas, del maíz y otras.
Reunión con la CGT
Capitanich informó luego que durante la reunión que mantuvo ayer con el titular de la CGT, Antonio Caló, y otros dirigentes sindicales "no se especificó ni porcentajes ni techo de paritarias".
Detalló que en el encuentro, del que además de Caló participaron José Luis Lingeri (Obras Sanitarias), Omar Viviani (Peones de Taxis) y Oscar Romero (Smata), "fueron cuatro los temas de agenda".
En ese marco, el funcionario enumeró: "Las perspectivas del funcionamiento del Consejo Nacional  Federal del Partido Justicialista, el interés de los trabajadores de participar activamente en la vida partidaria" y también "fallos de carácter judicial vinculados al tema de la afiliación de los trabajadores a sindicatos y sobre el funcionamiento de las obras sociales".
Además, el jefe de Gabinete aclaró: "No se especificó ni porcentajes ni techo de paritarias; nada de lo que por ahí se interpreta o sale. Lo que se planteó es que nosotros tenemos la convocatoria paritaria docente a partir del mes de febrero".