Así lo aseguró el senador bonaerense y dirigente sciolista (es
uno de los referentes de la agrupación La DOS), Alberto De Fazio. "No es
cierto que los policías vinculados al caso Arruga hayan sido
reincorporados", manifestó. La charla se produjo en "Basta de Zonceras"
(AM 740), versión radial de AGENCIA PACO URONDO. Seguridad, rol de la Bonaerense y política nacional. "Scioli no tiene nada que ver con Sergio Massa".
Por Enrique de la Calle
AGENCIA PACO URONDO: La semana pasada, el gobernador de
Buenos Aires, Daniel Scioli, presentó un paquete de medidas para
enfrentar la problemática de la inseguridad. Algunos proyectos deben
pasar por la Legislatura bonaerense. ¿Cuál es su opinión al respecto?
Alberto De Fazio: Se van a presentar en los Consejos de Justicia y
Seguridad dos proyectos: ampliar los derechos de las víctimas dentro del
proceso penal y determinar que todas las excarcelaciones se decidan
después de una audiencia oral y pública para que las víctimas o sus
familiares puedan participar y brindar sus opiniones. Son dos medidas
interesantes.
Además, se va a presentar un proyecto en el Congreso
Nacional para equiparar las penas por portación y tenencia de armas de
uso civil con la portación de armas de guerra. Es una modificación del
ex presidente (Néstor) Kirchner que agravó las penas para la portación
de armas de guerra. Eso tiene su explicación: un arma de uso civil, como
la 22, disparada desde corta distancia produce la misma muerte que un
arma de guerra. Se busca sacar las armas de la sociedad.
APU: Otro proyecto que históricamente se viene debatiendo
entre las diferentes fuerzas políticas tiene que ver con las policías
comunales. ¿Cómo evalúa el proyecto?
ADF: Es un proyecto histórico nuestro. Hay mucha discusión sobre el
tema: se discute cuál es la capacidad de un intendente de conducir una
fuerza armada. Es la principal objeción. Hemos trabajado en un
reglamento muy preciso para esa fuerza. Nadie está pensando en una
policía de prevención que se ocupe de delitos relacionados con el
narcotráfico. Se ocuparía de delitos como la entradera, el robo de
celular, de una cartera. Sería una policía de aproximación. En algunos
lugares del mundo funciona muy bien como en México o Madrid. En Londres
hay una experiencia de policía no armada. Puede funcionar, hay que dar
el debate. Incorporar 15 mil hombres en las comunas del Conurbano puede
contribuir a que la Bonaerense se ocupe de delitos complejos.
APU: Considerando que tanto el sciolismo como el massismo
están de acuerdo con la iniciativa: ¿Considera que se puede aprobar en
el corto plazo?
ADF: Se va a discutir. Estamos de acuerdo en el título pero no en la
redacción. Es importante la diferencia. Esperamos que se puedan
sintetizar rápido las diferencias para que se avance con la ley.
APU: ¿Qué evaluación hace sobre cuál es la situación de la
seguridad en Buenos Aires? ¿Qué balance hace de la gestión de Scioli en
ese tema?
ADP: Es una materia muy compleja. Es difícil hacer una síntesis.
Queremos avanzar en dos ejes: en el mejoramiento de las leyes y de los
códigos de procedimiento, eso tiene que ver con nuestro ámbito
legislativo. Después se avanzó mucho en el equipamiento de la fuerza.
Hasta hace seis años, la Bonaerense se formaba en la Vucetich,
ingresaban mil cadetes por año, y no había ningún control sobre la
currícula. Hoy hay tres escuelas descentralizadas, egresan 10 mil
hombres y están formados en universidades nacionales. Hay un cambio
sustancial en la matriz de la policía que va a llevar unos años. Con los
cadetes que tenemos hoy vamos a llegar a los 15 mil hombres formados en
universidades nacionales, con otro entrenamiento, otro profesionalismo,
otra matriz. En un par de años podemos llegar a tener el recambio que
tantas veces se pregona pero que no es sencillo. No hay una máquina de
fabricar policías. Hay que ser realistas. Se avanzó mucho. La dirección
de Asuntos Internos hace un trabajo muy serio, policía que se detecta en
situaciones que no corresponde es apartado inmediatamente. Lo que
evidentemente también hay es un delito complejo, más violento. Es cierto
que si uno analiza los últimos 15 años recordará los secuestros
extorsivos de la época del gobernador Solá. Por ejemplo, está el caso
Blumberg, lo que llevó a reformas del código penal que no son muy
auspiciosas. Muchos penalistas hablan del descalabro del código penal.
No hay que dejarse llevar por los que hablan de mano dura o soluciones
mágicas.
APU: Una crítica que se le hace a Scioli tiene que ver con
haberle cedido el control de la fuerza de seguridad a la propia policía.
¿Cuál es su visión al respecto?
ADF: Eso es un mito. El ministro de Seguridad es un civil. El jefe de
la policía se llama Daniel Scioli. Como el jefe de la policía Federal
es (Sergio) Berni. No hay autogestión de la policía. La fuerza obedece
las órdenes de los funcionarios civiles. No es verdad eso que se dice.
APU: Lo saco del tema seguridad. ¿Cómo ve las posibilidades de Scioli de cara al 2015?
ADF: Está entre los cuatro candidatos más importantes que tiene la
política argentina. Dentro del Frente para la Victoria y el Partido
Justicialista, es el hombre con mayor proyección. Esperamos que se
resuelva en una interna abierta que potencie a los candidatos, al FpV y
al PJ en su conjunto.
APU: ¿En esa interna tiene lugar Sergio Massa?
ADF: Queda claro que no. Massa eligió otro camino. Eligió un vuelco a
la derecha no peronista. Le disputa sectores a Carrió, a Macri, al
radicalismo. No está pensando en un armado peronista, por eso veo muy
dificultoso que pueda participar en un armado de ese tipo.
APU: ¿Qué opina de las críticas que emparentan ideológicamente a Scioli con Massa?
ADF: Que no tienen nada que ver. Absolutamente nada que ver. En el
ámbito de los Derechos Humanos la provincia de Buenos Aires es pionera.
En el ámbito de la producción, donde se complemente lo público con lo
privado, o cuando se implementan políticas progresistas y progresivas en
el ámbito impositivo. Massa plantea en política internacional un
acuerdo con los sectores republicanos del Norte, busca recostarse sobre
la Alianza del Pacífico privilegiando ese acuerdo sobre el Mercosur;
nosotros opinamos todo lo contrario. No tenemos nada que ver con Sergio
Massa.
APU: Hay sectores que señalan que hay otros dirigentes que
expresan mejor a lo que definen como un kirchnerismo más auténtico, más
puro. ¿Cuál es su opinión?
ADF: ¿Hay un medidor de purismo? No. Eso lo tiene que resolver el
votante. Es casi estigmatizante eso de hablar de puro o impuro. Porque
si hay puros hay impuros, y eso lleva a una categoría que no forma parte
de lo que pensamos los peronistas.
APU: Usted hizo mención a la política de Derechos Humanos del
gobierno provincial. En ese aspecto, existen muchas denuncias de
violaciones a esos derechos de parte de diferentes organizaciones, entre
ellas, la Comisión Provincial de la Memoria. Entre las críticas, está
la situación en las cárceles, el rol de las fuerzas de seguridad.
ADF: Nuestro secretario de Derechos Humanos es Guido Carlotto, él les
puede describir mejor las políticas específicas del Gobierno. Desde el
reconocimiento a las víctimas del plan Conintes hasta las de la última
dictadura militar. Eso no pasa en ninguna otra provincia. Nosotros, a
diferencia del Gobierno de Solá, que tenía las comisarías llena de
presos, iniciamos una política de construcción de alcaldías, obedeciendo
además a la Corte Suprema, para terminar con los presos en las
comisarías. Todas las denuncias contra personal policial fueron
atendidas, no hay policías protegidos. Una cosa es la retórica y otra
son los hechos. La provincia tiene como doctrina la defensa de los
Derechos Humanos. Puede haber funcionarios que cometan errores, pero hay
que ver la actitud de los que conducen las áreas.
APU: Hablando de actitud: ¿Cómo evalúa lo que ocurrió con los
policías señalados por su participación en la desaparición de Luciano
Arruga?
ADF: Están separados, fueron apartados.
APU: ¿No volvieron a la fuerza? Así lo denunciaron familiares de Luciano Arruga.
ADF: Siguen apartados. Están sujetos a investigación de Asuntos
Internos. A veces se dicen cosas que no son reales. De ninguna manera
fueron reincorporados a la fuerza.
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