Generando cambio

Generando cambio

La casita del bosque PDF Imprimir Correo
Escrito por Daniel Cisneros   
Viernes, 12 de Junio de 2020 10:29

altAhora que en el Uruguay ha habido un nuevo caso de prostitución infantil denominado Operativo Océano, hecho aberrante e indigno de los seres humanos...¿como puede ser que en pleno siglo XXI todavía salgan a la luz? Pero recordé el primer caso de estos hechos, cuando empecé a viajar a Montevideo. Fue en el 2013, en la ciudad de Paysandú, ciudad hermosa a la vera del río paraná pegadito a la ciudad de Colón. Tenía que estar cerca de otra ciudad populosa para ser el paso del contrabando. Siempre se sitúan así.
Es parte del esquema del contrabando, pero la diferencia en este caso es que Paysandu, también es muy importante, contando con un gran caudal de actividades, paseos y otras virtudes turísticas, con lugares de esparcimiento, contando con una cerveceria reconocida como "La Norteña" antiguamente se llamaba Paysandú y además para la temporada de semana santa tiene la fiesta de la cerveza, evento muy importante al cual suelen ocurrir varias personas. Al lado del rio tiene una ribera toda arbolada conformando un bosque. Fue allí a dónde algún intendente se le ocurrió poner una casita, y años más tarde, a otro intendente se le ocurrió alquilarla para fiesta de cumpleaños de los nenes de la ciudad y de paso ingresaban algunos pesos a las arcas del municipio.
Pasaron los años y vino una mala época, la fábrica de cerveza había echado empleados cosa que resintió en las arcas de la comuna, y la casita fue dejada de lado. En ese entonces se había instalado en el pueblo un cabaret que venía funcionando bien. Un secretario de gobierno vio la posibilidad de hacer unos pesitos extras, asociándose con la encargada de la casita y con el dueño del cabaret, como en esas cosas siempre el diablo mete la cola... se encontraron los tres y decidieron organizar fiestitas en el lugar con chicas en la casita. Probaron un domingo y les fue bien. Y así la siguieron cada mes y dale que va, vieron que no pasaba nada, seguían las fiestas.
La gente es discreta y poco comenta, hasta que las llevaron hacer todos los fines de semana. Ya era "vox populi" que en la casita del parque se hacían fiestas, pero he de aquí que un dia domingo, uno de los parroquianos sale con su camioneta con una menor sentada a su lado, mientras que atrás iba la encargada de la casita. Nada sorprendente tal vez, todo estaba bien pero, dicho parroquiano estaba totalmente alcoholizado y algunas sustancias prohibidas demas tenia el cristiano, de tal manera que esa camioneta iba haciendo "eses", cosa que llamo la atención del patrullero que pasaba por el lugar y lo paró para averiguar sobre los papeles del auto y otras normativas, por supuesto "se armó la gorda", pues cuando le pregunta al susodicho que hacía la menor y encima no tenía papeles, al parroquiano encima se le ocurre decir que venían de la casita. Entonces el jefe del operativo manda otro patrullero al lugar y había una fiesta de aquellas, encima los ladrillos estaban apilados al lado de la parrilla... un escándalo fenomenal.
Por tal motivo renunció el secretario de gobierno y la casita hoy esta inhabilitada. Y así se terminó todo esa etapa macabra para el pueblo. Pero al parecer no para el país ya que hoy en día, se siguen encontrando casitas en los bosques.

 
Joomla 1.5 Templates by Joomlashack