FUE 3 A 2 CONTRA TIGRE EN SARANDÍ, EN UN ENCUENTRO BIEN JUGADO

Desde el inicio lo que pintaba se dio con creces, ya que los dos equipos salieron a ganar, sin maltratar la pelota y con enormes jugadas que provocaron sinsabores en ambas defensas.

La contradicción a veces se da en estos cotejos que se busca el gol incesantemente y los goles conquistados por Arsenal, fueron anotados por sus dos zagueros centrales y no por sus delanteros y volantes ofensivos. Lisandro López en dos oportunidades con sendos golpes de cabeza, mediante pelotas paradas y Diego Braghieri, conquistando el 3 a 2 definitivo, ante una asistencia perfecta de Benedetto, con dos fallas consecutivas de los defensas tigrenses, fueron los artífices del triunfo de Arsenal. Tigre no le dio tregua a los del Viaducto y provocó dos empates, el primero por intermedio de Santander, quien se fue lesionado y reemplazado por Ftacla, autor del segundo empate, previo a una jugada magistral de su mejor hombre, Matías Pérez García.

Mencionaba en el título principal, que el arbitraje de Álvarez fue deficiente, producto de dos fallas que incidieron netamente en el resultado del encuentro, en primer lugar cuando Arsenal anota la primera conquista, pues el zaguero Lisandro López, estaba medio metro adelantado y luego no le dio un claro penal a Tigre, ante una jugada exquisita de Leguizamón, que fue devuelta con una mano casi en la línea, teniendo que haber expulsado al defensa local, por ser último recurso.

El fútbol es así y hay que asumirlo como se presenta, porque Tigre perdio en los minutos finales, un partido que estaba más cerca para ganarlo que para perderlo, ya que el elenco local estaba  visiblemente perdido en la cancha, ante la superioridad de los jugadores del "Matador".