La ciudad comenzó a jugar la Copa del Mundo. En las zonas comerciales, los locales comenzaron a mostrarse decorados con banderas argentinas y la imagen de Lio Messi como símbolo mundialista. El Mundial apodera la atención total.

Mientras la Selección Argentina ya practica en Brasil con la vista puesta en el primer encuentro ante Bosnia en el Maracaná, el domingo a las 19, en Florencio Varela comenzó a palpitarse la pasión por la celeste y blanca, como en cada cita mundialista y al igual que en cada fecha importante para la Patria.

Gorros, bufandas, camisetas y cornetas con los colores argentinos se multiplican en vidrieras de comercios del Centro varelense, pero también en las diferentes localidades. Banderas nacionales también flamean en ventanas y hasta en automóviles. Las tiendas de indumentarias (tanto de hombres, mujeres y niños) aprovechan el atractivo del Mundial de Brasil para decorar vidrieras en alusión a la Copa, hasta con papelitos picados y maniquíes vestidos de “Messi”. El objetivo: incrementar las ventas aprovechando el atractivo.

Justamente la imagen del crack de Barcelona y 10 de la Selección, es la más repetida y utilizada en el denominado merchandising albiceleste. A “Lio” se lo puede encontrar gritando goles para argentina en vasos, platos, remeras, mates, termos, pantallas de TV y en relojes de pared, entre otros. Los precios para cada producto oscilan de acuerdo a su uso. La pelota oficial del certamen, “Brazuka”, es otro símbolo del momento. En las casas de deportes se exhiben junto con la camiseta de la Selección y también con la de Brasil. Los precios rondan los $800 para el balón y $750 para la casaca argentina o de otro combinado de fútbol. Los botines de la marca de las tres plumitas que usa el capitán del equipo de Sabella, alcanzan los $1000.

Aprovechando la coincidencia con el festejo por el Día del Padre, algunas tiendas acoplan el furor mundialista. Es el caso de los locales de Narrow, por cada compra superior a los mil pesos regala una camiseta argentina para alentar al conjunto nacional. Mientras que la casa de café ubicada sobre la calle Bocuzzi entre Monteagudo y España, ofrece kits para papá con productos comestibles (al estilo picada) para ver el primer partido en la tarde del domingo y también golosinas del Mundial para que los chicos de la casa se diviertan compartiendo. Hasta una carnicería del centro (de Sallarés casi la Peatonal) vistió el local con guirnaldas y globos celestes y blancos. El clima de la Copa también llegó a las popularmente conocidas como “máquinas de peluches”. Por algunos pocos pesos, un kiosco de la calle España permite jugar a sacar “arlequines” albicelestes.

Mientras que en las casas de electrodomésticos, cualquier producto relacionado con la tecnología como celulares, televisores, tablets e incluso cafeteras, se muestran junto con banderines, globos y serpentinas con los colores argentinos.

El clima del Mundial llegó a Varela con el entusiasmo de cada cuatro años, con la esperanza de volver a gritar campeón.