ROTUNDA Y CONTUNDENTE VICTORIA URUGUAYA

¿Que se puede decir de éste último campeón de la Copa América? Lo mejor, todo lo bueno y resaltador, porque fueron de menor a mayor, al principio sin convencer como la mayoría de los intervinientes en el torneo, pero de los cuartos hasta el final demostró su legitimidad y consiguió lo que vino a buscar, con humildad e hidalguía.

Para muchos el triunfo frente a la selección argentina no fue merecido, pero luego de un primer tiempo complicado, supo manejar la situación con un despliegue táctico inteligente, conquistando un éxito merecido y fue apuntalando su estrategia a los pasos definitorios, convalidando con total autoridad sus prentensiones frente a Paraguay en la final que terminó hace instantes. 

Lo borró a los paraguayos literalmente del campo e impuso un juego práctico, vistoso y efectivo en todos los momentos de la contienda, con un medio juego eficaz y sobresaliente y definidores exquisitos como Luis Suarez (el mejor del torneo) y Diego Forlán que apareció con su enorme categoría precisamente en el final de la Copa.

Reivindicaron el fuego sagrado del fútbol uruguayo y se llevó con total justicia un trofeo añorado y que será la prueba elocuente para toda la parcialidad charrúa en su largo festejo por el éxito obtenido.

De Paraguay, el subcampeón, sin haber ganado ningún partido, le alcanzó para llegar a las instancias definitorias, pero muy lejos de ser aquel equipo aguerrido, quedándose sin fuerzas para sobrellevar la superioridad uruguaya.