En el debut oficial de Néstor Gorosito como técnico:

TIGRE DIO VUELTA UN RESULTADO, QUE PARECÍA IMPOSIBLE DÍAS ATRÁS 

En Quito, Tigre había perdido por 2 a 0 y con las recientes actuaciones del equipo de Victoria y el cambio de su técnico, daba la impresión, que resultaría muy complicado dar vuelta a la historia, simplemente porque Tigre jugaba mal y estaba desorientado y sin ánimo.

Sin embargo con la llegada de Gorosito, que atribuyó todo el éxito a quien fuera el entrenador renunciante, se modificó totalmente el esquema de este Tigre que está para el asombro. Cuando menciono la palabra esquema, no me refiero a la forma de jugar del equipo en sí, simplemente, me refiero a el evidente cambio de actitud y toda la predisposición y entrega que dejó en el terreno el equipo de Victoria. Con actuaciones sobresalientes (caso Botta, Donatti) borró del campo a un Deportivo Quito que estuvo aferrado a mantener el cero en su arco, algo que no pudo conseguir, porque ya a los 10 minutos de iniciado el match, le habían sacudido sus postes en dos ocasiones y a los 15 ya Tigre estaba en ventaja, ante un soberbio golpe de cabeza de Maggiolo.

Sin dudas las expulsiones, primero Leone para el equipo argentino y las dos producidas en el elenco ecuatoriano, cambiaron el trámite, favoreciendo netamente la situación al conjunto de Gorosito, que después del segundo gol marcado por Gastón Díaz (la figura central del espectáculo) de penal, vinieron otros dos, primero por intermedio del zaguero Donatti, también con otro golpe de cabeza impresionante, cerrando con una joyita brillante del volante ofensivo Rubén Botta (cada día mejor) que dejó mal parada a casi toda la defensa del Quito.

En defrinitiva, un rotundo 4 a 0 que pone a Tigre, por primera vez en su historia deportiva en una situación inmejorable, llegando a cuartos de final de la Copa Sudamericana, para enfrentar el próximo jueves en Asunción a un difícil y principal candidato, como Cerro Porteño.