El salón inmobiliario de Pilar 2017 se desarrolló con gran éxito y permitió presentar algunos proyectos y plantear el escenario de inversiones luego de la era kirchnerista. El encuentro que se realizó en La Herencia Eventos contó con la apertura del presidente Alejandro Bennazar, de la Cámara Inmobiliaria Argentina, el jefe de Gabinete del Municipio de Pilar, Juan Pablo Martignone y los hijos de Meyer Oks, fundador del Parque Industrial Pilar, Pablo y Daniel Oks que fueron reconocidos por Damián Tabakman, director académico del encuentro. A medida que el día avanzaba y los disertantes ganaban confianza, se iban desnudando las enormes complicaciones que afrontan en la actualidad. Inflación, atraso cambiario, carga impositiva, rigideces laborales, cierre de la economía a la hora de acceder a productos importados mejores y más baratos, dificultades para financiar proyectos y encarecimiento desmedido de la tierra, fueron algunos de los puntos señalados, que por lo visto no llegan a compensar el efecto positivo de la nueva oferta hipotecaria como para motorizar seriamente, nuevos proyectos. Las críticas a la acción estatal en los Gobiernos Nacional, Provincial y Municipal pronto quedaron al descubierto, teniendo en cuenta que por la burocratización del desarrollo privado y en ese punto apuntaron a las Comunas con las que ponen más trabas para el desarrollo de las inversiones.
Marcelo Longobardi, a su vez, enmarcó estas adversidades, que describió como minimalistas, en un entorno global igualmente complicado. Gasto público por las nubes, dólar por el piso, inflación que no cede y desencuentros políticos que no logran siquiera mostrar una luz de esperanza dado que, a su juicio, la macro actual es inviable, y cualquier corrección solo podría asomar de manera dolorosa y conflictiva.
A su turno el gobierno jugó un buen papel. Los altos funcionarios presentes bosquejaron respuestas genéricas a las críticas políticas pero luego expusieron las medidas concretas que están tomando de cara al sector, tales como el impulso a los créditos hipotecarios, el plan Procrear y la subasta de terrenos fiscales.
Al final del día me tocó cerrar poniendo paños fríos respecto de la velocidad con la que vale la pena lanzar proyectos apuntando al comprador con hipotecas Uvis. Avanzar sí, pero no tan rápido. Y mientras tanto, el segmento más alto de la pirámide muestra casos súper exitosos como nuestro proyecto atrás del Malba vendido completamente en un mes, holgadamente arriba de los diez mil dólares por metro