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Escrito por Humberto Tempone
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Miércoles, 14 de Septiembre de 2011 05:03 |
ANÍBAL FERNÁNDEZ PARTICIPÓ DEL TALLER “COCINANDO POLÍTICA” Y PRESENTÓ SU LIBRO
 El jefe de Gabinete Aníbal Fernández participó, este martes, del taller “Cocinando política y otras yerbas” que la presidenta de la Asociación Madres de Plaza de Mayo, Hebe de Bonafini, dicta todos los martes en el Espacio Cultural Nuestros Hijos (ECuNHi).
Ante los alumnos que asisten al taller, el Ministro presentó su libro “Zonceras argentinas y otras yerbas” en el que, continuando la obra de Arturo Jauretche, combate y desarma un conjunto de mitos y frases hechas, repetidas incansablemente, fruto de la construcción del discurso hegemónico.
Mientras esperaban la llegada de Fernández, Hebe y sus alumnos comenzaron a preparar el menú del día: unos exquisitos buñuelos de ortigas, elaborados allí mismo.
Al arribar, la Presidenta de la Asociación recibió al Jefe de Gabinete y le comentó el propósito del taller que ofrece desde hace varios años: “Recuperar nuestras semillas, cocinar y comer barato y hacer política”. Enseguida, Aníbal comenzó a picar la ortiga. Con tanta premura que aún no se había puesto el delantal que le tenían preparado para la ocasión, con la imagen de Doña Pepa, la mamá de Hebe.
Luego, mientras Hebe y un grupo de compañeros continuaban con la preparación, el funcionario narró cómo surgió el libro y repasó las zonceras más importantes: “Estaba buscando un libro para llevarme de vacaciones y como soy un jodón bárbaro, cuando jodo, jodo: me llevo libros de historia, de esos divertidos. Empecé a buscar por Internet qué había y lo que empiezo a notar es que hay un montón de tipos, muchos de ellos impresentables, que escriben un montón de cosas en contra de lo que uno piensa y nadie dice nada. Y no pretendo cercenar la libertad que conseguimos entre todos pero lo tonto es que nosotros seamos los que nos tapamos la boca a nosotros mismos”.
Con ese objetivo, y junto a Carlos Carmelo, se propuso continuar la obra de Arturo Jauretche, también a modo de homenaje: “Lo que hicimos fue agarrarnos de su herramienta, que él nos enseñó. El prólogo dice eso: es una especie de charla mía con don Arturo, pidiéndole las disculpas del caso. Yo no soy Arturo Jauretche ni quiero parangonarlo. Lo que hago es agarrar su herramienta, porque él dice que deja unas páginas en blanco –que nosotros también las dejamos, para que cada uno anote su zoncera– porque va a seguir habiendo muchas”.
“Arrancamos por la primera de todas –siguió Aníbal–, que es la que Jauretche utilizó y llamó “Civilización y Barbarie”. Así nace aquel y así nace nuestro libro. ¿Qué quiere decir civilización y barbarie?: lo que se expresó durante tanto tiempo, que lo que viene de afuera –y si viene de Estados Unidos, mucho mejor– es bueno y lo que hacen los argentinos es malo. Que algo venga de afuera no es necesariamente civilización, a veces es un dolor de cabeza más grande de lo que se imaginan. Nos ponen como ejemplo Francia, pero en Francia cuando los inmigrantes prenden autos, dejan de ponerlo a Francia y lo ponen a España, pero cuando España está dentro de los que están en crisis, ponen como ejemplo a Brasil”, detalló el Ministro ante la mirada atenta y la escucha silenciosa.
Posteriormente, y mientras detrás suyo las ortigas iban tomando forma de buñuelos, continuó repasando otras zonceras que aparecen en el libro: “La tres, la cuatro y la cinco son para las que se dedican a agraviar a los que menos tienen, a los pobres. Nosotros hacemos un acto y lo primero que dicen es ‘van por el choripán y la Coca’. La pucha, primero que no es cierto porque el que va a un acto, y dentro de los actos que hacemos nosotros, que se llenan de gente, van porque les place. Ellos quieren degradar para llevarlo a un punto donde sea oprobioso, malo. Pero si los compañeros van con nosotros también y van a estar muchas horas afuera, ¿por qué está mal también darle, a lo mejor, un sándwich y una Coca? ¿Dónde está lo malo?”, se preguntó. &ldqu o;Si fuera como ellos dicen, que regalando sándwiches se resuelven las cuestiones políticas, en Estados Unidos Ronald Mc Donald sería presidente”, agregó entre risas y aplausos.
A lo largo de su exposición, Fernández mencionó su trabajo en primera persona del plural (“nosotros”), lo que permitió dimensionar su labor de autor como una obra colectiva, que recoge el pensamiento y el deseo de un sector de la sociedad dispuesto a poner blanco sobre negro un sinnúmero de expresiones descalificadoras. En ese sentido, las categorías “nosotros” y “ellos”, no necesitaron mayor precisión: quedó claro quiénes eran los unos y quiénes los otros.
En otro tramo, Aníbal se refirió al libro en estos términos: “Más que un texto, es un gesto: a los que nos están mintiendo en la cara, diciéndoles que sabemos que son unos mentirosos; a la sociedad para ayudarla a pensar, con humildad lo digo; a la juventud, porque le jode a la derecha”.
Además, destacó, con datos precisos, las transformaciones que pusieron en marcha Néstor y Cristina Kirchner y que, según sus palabras, son la génesis para que los sectores opositores fomentaran y estructuraran el surgimiento de cientos de zonceras. Por ejemplo, mencionó al “viento de cola”: “Cada medida que tomaba la Presidenta, se convertía en política pública y esa política pública implicaba soluciones para una parte de un sector económico: lo primero que decían es que era por el ‘viento de cola’. Pero resulta ser que nosotros no dejamos de crecer desde el año 2003, con Néstor, que tuvimos un crecimiento de entre 8 y 9% por año, que soportamos la crisis”, expresó.
Otra zoncera que destacó fue “Aumentar los salarios es inflacionario”. Sostuvo: “Es un verso que nos metieron. No son inflacionarios. La inflación la generan los que ponen la plata para que digan que los salarios son inflacionarios. Nosotros defendamos siempre los sueldos de los trabajadores. No son inflacionarios. Está bien clarito y bien demostrado”
Por otra parte, mencionó algunas zonceras del campo. “Nos dijeron durante muchos años ‘fuimos el granero del mundo’. Mentira: fuimos la chacra de Inglaterra, que son dos cosas distintas”.
Ya sobre el cierre, reflexionó: “Nosotros creíamos que le damos un mensaje a la sociedad y sobre todo a la juventud, que es un nuevo viejo enemigo de la derecha, que siempre confrontó con juventud. Miren lo que pasa cuando muere Néstor que vieron tantos pibes en la plaza. A una candidata que sacó el 3%, le dio por decir que el velatorio lo organizó Fuerza Bruta y yo lo que digo es que hay que hacer mucha fuerza para ser tan bruta. Le molestaba que estaba tan llenos de pibes, que brotaban debajo de las baldosas”.
Antes de compartir los buñuelos, el Ministro citó, bajó la mirada de Hebe y todos sus alumnos, desde versos del Martín Fierro a la canción “El Hormiguero” de Calle 13: “’Prefiero morir como rebelde, que vivir como esclavo, apuesto que los tuyos, se rinden primero, porque los soldados míos no pelean por dinero’. Ésa es la juventud de los argentinos”, afirmó.
Por último, uso una frase para comparar el contexto del libro que Jauretche presentó el 20 de noviembre de 1968 y del suyo: “Los enemigos son exactamente los mismos”.
Tras sus palabras, Hebe lo convidó con el primer buñuelo de ortigas: “Muy bueno”, sostuvo el Jefe de Gabinete, entusiasmado con lo que acababa de probar. Luego, mientras firmaba ejemplares, conversó con los estudiantes, compartió la degustación y se sacó decenas de fotos.
A su lado, la profe Hebe le agradecía la visita mientras el Ministro reconocía la invitación. Alrededor, los pocos buñuelos que quedaban y los libros en las manos de los alumnos reflejaban el éxito de la jornada.
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Última actualización en Miércoles, 14 de Septiembre de 2011 05:10 |
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