"El lugar es una ofensa a la dignidad humana"

Abel Córdoba, titular de la Procuraduría Contra la Violencia Institucional, habló sobre la inspección a la Alcaldía de Tribunales ubicada en el mismo edificio de la Corte Suprema. En el lugar se registraron infrahumanas condiciones de detención.

  Por Juan Ciucci

AGENCIA PACO URONDO: ¿Cuál es la situación en la cárcel que se encuentra debajo de Tribunales?

Abel Córdoba: Desde la Procuvin estamos inspeccionando diferentes lugares de encierro. Hemos ido a cada provincia recorriendo cárceles del sistema penitenciario. Una de las investigaciones que estaba pendiente era la que nos llevó a la Alcaldía de los Tribunales que está en el mismo Palacio de Justicia, en el micro centro porteño. En ese edificio se encuentran innumerables juzgados y la propia Corte Suprema. Es un lugar donde las personas detenidas que pasan primero por la comisaría, son derivadas previamente a tener la audiencia con las autoridades judiciales. Allí deberían transitar unas horas hasta ser puestos en libertad o derivados  a algún lugar de encierro permanente.
La situación es sumamente grave. Es un lugar inviable para mantener personas, está preparado para que una persona esté unas horas y no podría haber más de 20 o 25 detenidos en ese lugar. Encontramos 120 personas hacinadas, algunas hace más de un mes que están en ese lugar, durmiendo en el piso, sin colchones. Ninguna tenía algún tipo de comodidad para dormir. Se encontraban mal alimentados, sin acceso al aire libre, sin ventilación, en lugares con notaria falta de oxígeno, expuestos a la suciedad más absoluta.
APU: ¿Esta cárcel de quién depende?
AC: Esta cárcel es una Alcaldía que depende del Servicio Penitenciario Nacional y el edificio en sí, es un espacio cedido por el Poder Judicial. Lo grave de esta situación es que esto ocurre dos pisos abajo de los despachos judiciales. Una situación medieval donde uno ve gente durmiendo directamente en el piso, con hambre, sin atención médica y en algunos casos con marcas de golpes provenientes de las comisarías. Uno sube unas escaleras y se encuentra con el mundo judicial que tiene un aspecto más civilizado pero el trasfondo de eso es absolutamente medieval.
Esto da cuenta de lo que es el sistema judicial en términos generales, grafica lo que ocurre en muchos expedientes.
APU: En este caso, el Alto Tribunal debería conocer la situación de lo que sucede ahí ¿No?
AC: Ese lugar no puede continuar ni un segundo más así. Nosotros consideramos que esa situación debe ser relevada, atendida con suma urgencia porque es una ofensa a la dignidad humana. Como ha dicho un coordinador de lugares de encierro de esta Procuraduría: es uno de los peores lugares de la Argentina para estar detenido, a tal punto que algunos piden que se los lleve a las cárceles antes que estar allí.
APU: Mencionaba que este no es un caso aislado sino que es parte de una situación lamentable en el actual Servicio Penitenciario Nacional.
AC: En ese caso, el contraste con la presencia judicial es lo que de alguna forma descoloca y deja perplejo al que lo pueda constatar. Pero sí, son parte de las condiciones que venimos constatando. Hace unos días hemos estado en el Penal de Marcos Paz, tuvimos que clausurar pabellones. Es la constante de una situación sumamente grave que luego deriva en torturas y muertes.
APU: De cara a las elecciones, muchos candidatos hablan de seguridad. Evidentemente, la discusión sobre el estado de las cárceles no aparece, ¿Cómo ve que se trata el tema socialmente y cuál es el impacto social de estas condiciones de encierro?

AC: Habría que analizarlo una vez que se conozcan las condiciones en las que están. Parte de que esto no se modifique es porque no es puesto en evidencia, ni siquiera es mostrado. Por eso creo que la publicidad de esas condiciones debería hacer reaccionar a quien tenga noción de lo que implica para una persona estar sometido a esas condiciones de encierro y lo que eso implica en términos de maltrato estatal, por parte de funcionarios públicos. También es cierto que estas situaciones son legitimadas por sectores sociales que tienen interés en que esto se así, eso tampoco se nos escapa.

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