Ignacio Copani, con su tema «El Clarìn» nos abre ojos, mentes y oìdos
  Que nos desinformen a diario, ya es una costumbre tradicional en Argentina, algo que sucede en casi todo el mundo, principalmente, cuando los medios hegemònicos de la informaciòn, tienen el predominio absoluto de las comunicaciones, cosa que no nos sorprende y por ello, sabemos como reaccionar cuando las noticias que nos llegan, no condicen con la realidad.
Esto no significa para nada, creer que tenemos siempre la razòn y todo lo que viene del otro lado, lo subestimamos o no tiene credibilidad, lo que sucede, es muy simple, un elevado porcentaje de las noticias que recibimos, estàn teñidas o manchadas de malaintenionalidad o representan a intereses bien ajenos, a los que nos representan, y no son otros, que los que defendemos un modelo nacional y popular en todas sus dimensiones.
Hemos tenido que soportar de algunos sectores, dudas sobre la verdadera apariciòn del nieto de Estela de Carlotto, llegàndose a difundir, que son maniobras del gobierno para tapar los supuestos problemas que vive el paìs, màs aùn, con estas ametrallas constantes con los Fonos Buitre. Se llegò a decir que Guido habìa aparecido hace algunos meses, pero que el relato del gobierno, demorò en transmitirlo, por las causas comentadas lìneas arriba, esperando una ocasiòn màs propicia para darlo a publicidad. Tamaña falta de respeto a la lucha de Abuelas y Madres de Plaza de Mayo, no merecen un centìmetro màs de comentario, por lo tanto, seguimos con el anàlisis intentado por quien escribe esta editorial.
Los logros indiscutidos que viene acumulando el gobierno de Cristina Fernàndez, en varias disciplinas que estaban paralizadas, al menos, desde hace 30 años, no son ingredientes fàciles de digerir, por lo tanto, los sectores dominantes, socios concretos de estos medios que aludo, tienen que inventar otro tipo de acciones, para manipular a la opiniòn pùblica, algo que logran en muchas ocasiones, por èse constante còcteles de noticias, totalmente ajenos a lo real.
No voy a profundizar en estos escritos que le transfiero en el dìa de hoy, si Làzaro Bàez, Cristòbal Lòpez o las causas perfectamente manejadas en contra de Amado Boudou, son tan importantes para la poblaciòn en su conjunto, simplemente, porque cada una de ellas, no contienen viso de credibilidad y han sido manejadas con mucha inteligencia por estos medios, como para hacer creer a la sociedad, que se trata de autenticos delincuentes, y que cuentan con el apoyo irrestricto de la Presidenta de la Naciòn. Como la justicia es tan lenta e ineficaz, seguramente, con el transcurrir del tiempo, se van debilitando y todo quedarà en la normalidad, pero lo que tienen en claro los sectores que abiertamente se declaran en contra del paìs, es la metodologìa que les da resultados, entonces, en èse incesante correr de los meses, intentan llegar a las elecciones presidenciales del 2015, con una confusiòn bien centrada en la comunidad, esperando el triunfo de cualquier opositor que los represente y de esa manera, podràn regresar a los 90, para ejecutar las polìticas que nos han llevado a la barbarie en estos ùltimos 26 años.
Lo sugestivo de todo esto, que los mismos que pregonan una justicia severa contra los nombrados anteriormente, no pueden mirarse al ombligo, para darse cuenta que estàn incumpliendo todas las leyes vigentes, pero al desinformar y manipular al pueblo con sus mentiras, logran que la sociedad, no se de cuenta de los graves errores y delitos que cometen a diario, al no aceptar lo que el parlamento argentino ha dictaminado en su oportunidad.
A casi seis meses de cumplirse el plazo que otorgò la Corte Suprema de Justicia, para que el Grupo Clarìn se adecùe a las normativas del Artìculo 161 de la vigente Ley de Medios se Servicios Audiovisuales, el mencionado grupo conducido por Hèctor Magnetto,todavìa sigue haciendo caso omiso sobre el tema y sòlo le quedan 10 dìas para cumplimentar tal orden, algo que tuvo que ser advertido severamente por el AFSCA. Ademàs, siguen sin cumplir el ordanamiento de la grilla en televisiòn en algunos casos; no hemos adelantado un centìmetro con relaciòn a Papel Prensa; no hay ninguna novedad con la situaciòn de los Graiver; con el presunto lavado de dinero de algunos dirigentes del Grupo Clarìn en Panamà; con el movimiento sospechoso que le dejò una ganancia de màs de 580 millones de dòlares con el tema de las AFJP; el cuestionado caso de los desmontes en el Chaco, producto del accionar de uno de los màximos exponentes de Clarìn, Josè Aranda; el controvertido rubro 59 prohibido en el la difusiòn, pero le cambiaron el nùmero y siguen violando la ley, incentivando la trata, o la total adhesiòn y complicidad en aquel blindaje y megacanje, que derivò en una deuda externa para los argentinos de unos 180 mil millones de dòlares.
Fìjense que paradòjico este ùltimo ìtems, ya que la causa que involucraba al economista y ex presidente del banco Ciudad, actual diputado de la Naciòn por el PRO de Mauricio Macri, Federico Sturzenegger, entre otros involucrados, prescribiò por no ser tratado en toda su dimensiòn, pero se preocupan con mucho ènfasis, en un supuesto auto trucho comprado por Amado Boudou, algo que sucediò en 1993, siendo procesado 21 años despuès. ¿Que sugestivo, no?
Me viene a la memoria todo èse odio hacia la figura de Vìctor Hugo Morales, de parte del CEO de Clarìn y el ataque incesante en los juzgados para despedazar al popular periodista uruguayo, con cualquier cosa que se les viene en mente, pero es fàcil deducir que la apariciòn del libro escrito por Vìctor Hugo, «Audiencia con el Diablo», nos hizo conocer tantas cosas que gran parte del pueblo desconocìa y todo esto, es algo que irremediablemente desde Magnetto y todo su entorno, no pueden refutar y eso encamina a una guerra que no tiene fin.
Este pueblo que sale a la calle en defensa de los intereses de la naciòn, como lo hizo hace un par de dìas en el Luna Park, en contra de los Fondos Buitre y a favor de lo que ejecuta el gobierno de Cristina, no puede seguir contemplando y tolerando a estos personajes nefastos de nuestra actualidad y debemos seguir luchando y redoblar energìas, para que los sujetos mencionados, estèn en el banquillo de acusados como corresponde, de la misma forma, que terminaron la cùpulas militares genocidas de aquella atroz dictadura cìvico-militar.
Viene perfecto hacer conocer a toda la sociedad, porque considero que no està debidamente enterada, de ese tema que compuso Ignacio Copani, en franca alusiòn al Grupo Clarìn, el cual lo denominò precisamente, «El Clarìn», que nos hace entender aùn mejor, a que se dedica realmente este grupo, que viene manipulando a los argentinos desde hace 69 años y todavìa se mantiene con el mismo poder, o mejor dicho, lo ha acrecentado, por esa manìa de gran parte de nuestro pueblo, en consumir lo fàcil y no querer abrir ojos, mentes y oìdos, para darse cuenta, cuàl es el objetivo de estos sectores, y cuàles son los caminos correctos a recorrer.
Aunque de manera humorìstica y jocosa, Copani realizò esta obra, tiene un contenido, que lo considero esencial para los momentos que vivimos. Aquì va la letra de:
«El Clarìn» (letra y mùsica de Ignacio Copani)
El clarín es un simple instrumento,
algo más que una torpe corneta.
Musical artefacto de viento
que oís un momento y después te atormenta.
El clarín era un cuerno de caza
pero no de cualquier cornamenta,
era el asta de bueyes de raza,
que por donde pasan, el miedo acrecientan.
El clarín no combina armonías,
suena igual si lo sopla su dueño,
o su tropa, o su cofradía y peor todavía,
si sopla un ingenuo.
Quiero que suene el clarín, su alarido, su aullido y su queja.
Que lo sufra quien lo quiera oír, yo prefiero al clarín bien lejos de mi oreja.
Quiero que suene el clarín... De una vez.
El clarín desde tiempos de antaño
fue forjado en diversos metales,
por lo tanto con menos tamaño,
logró hacer más daño, a más animales.
El clarín de esa forma atraviesa,
por más campos que en la cacería.
Tempranísimo anuncia que empiezan
batallas que apestan y arruinan el día.
El clarín de por sí es mentiroso,
a lo lejos parece trompeta,
al mirarlo de cerca es tan soso
y su tono filoso, el alma te agrieta.
Quiero que suene el clarín, su alarido, su aullido y su queja.
Que lo sufra quien lo quiera oír, yo prefiero al clarín bien lejos de mi oreja.
Quiero que suene el clarín... De una vez.
El clarín nunca habrá de escucharse
musicando un adiós ni un regreso,
ni en los sueños, ni en los despertares,
ni en cielos, ni en mares, ni en risas, ni en besos..
El clarín no posee una tecla
que acaricie el calor de una mano,
ni el vibrar de una fiesta entre cuerdas,
que se alce y se pierda en la fuerza de un piano.
El clarín siempre estuvo asociado
al llamado de la hora más cruel.
Canta mal si es de bronce dorado,
de hueso o armado de tinta y papel.
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