Escrito por Gerardo Bova
|
Jueves, 04 de Septiembre de 2014 11:45 |
Cuando se carece de ideas, aparecen los destituyentesParecen
calcadas las intervenciones opositoras, cuando se van achicando los
tiempos, con relaciòn a una pròxima elecciòn, màxime, cuando se elige un
nuevo presidente de la naciòn, porque revisando la forma de proceder de
los ùltimos tiempos, nos percatamos que utilizan los mismos mètodos,
ademàs, de sentirse «ofendidos», al no dejarlos participar de los
proyectos que emite el oficialismo, de una manera, casi dirìa, infantil e
inmadura.
Aducen que tales iniciativas proyectadas por el Ejecutivo,
y que van al Parlamento para su debate legal, de acuerdo a los
contenidos constitucionales, no pueden, ni deben, ser modificadas, ni
siquiera en una coma o un punto, por esa soberbia que muestra el
gobierno nacional, de acuerdo a las opiniones vertidas por estos
sectores de la oposiciòn polìtica. Los hechos recientes y actuales,
con relaciòn a los proyectos de Ley de Abastecimiento; Ley de Pago
Soberano de la Deuda; Ley de Defensa del Consumidor, etc, son evidencias
notables de lo que estoy comentando en esta nota, ya que estàn
decididamente en contra de todo lo propuesto por el gobierno, sin
revisar dichos fundamentos de los proyectos aludidos, ademàs, de no
ofrecer alternativas concretas, para la discusiòn parlamentaria. Es màs,
las pocos ideas que presentan, estàn emparentadas con las viejas
recetas neoliberales, que llevaron al paìs a la desidia y barbarie. Pero,
lo màs sorpresivo tal vez, no es esa falta de ideas visibles,
simplemente, porque es algo habitual, lo que màs inquieta a la sociedad,
es la maquinaria destructiva que ostentan estos personajes, utilizando
metodologìas destituyentes muy serias, deseando repetir las mismas
acciones que permitieron el alejamiento de la entonces presidenta Isabel
Martìnez; Raùl Alfonsìn y Fernando De la Rùa. Escuchar a Javier
Gonzàlez Fraga, anunciando que deberìa buscarse alternativas, para que
Cristina Fernàndez deje la presidencia antes de terminar su mandato
constitucional y adelantar las elecciones, simplemente porque «la gente
se pone nerviosa cuando falta dòlares» (¿¿¿???); a Elisa Carriò decir
que quiere exterminar a Jorge Capitanich; a Cristiano Ratazzi de Fiat
Argentina, en diàlogo con Mirtha Legrand, deseando ambos que Axel
Kicillof, se quedara sin voz; a Mauricio Macri, Julio Cobos y Hermes
Binner, manifestàndose a pagar lo que el Juez Thomas Griesa determine,
significa literalmente, que desean un cambio de gobierno ya, antes de
que se cumpla el periodo constitucional, ademàs, de alarmar al pueblo,
con una presunta recesiòn, que provocarà pèrdida de empleo, aumento de
la inflaciòn y que estamos entrando en un grado de desesperaciòn, que
nos llevarà iremediablemente al 2001. Uno debe preguntarse en
realidad, si aquellos tiempos del 2001 y estos que vivimos actualmente,
tienen algùn signo de similitud y si las condiciones econòmicas del
paìs, son las mismas, evidentemente, nada de esto es real y las
condiciones que ostenta nuestro paìs, no sòlo en lo interno, sino a
nivel interacional, es totalmente adversa a lo sucedido hace 13 años, y
de ninguna manera, se puede tolerar semejantes anuncios
desestabilizadores, porque està a la vista, que lo ùnico demostrado en
el intento, es perturbar la mente de los argentinos, tratando de
hacerles creer, que estamos entrando en una etapa final de un proceso y
que es necesario producir cambios en forma urgente, a sabiendas que
cuentan con el apoyo irrestricto de las corporaciones, con el fin de
apoderarse nuevamente de nuestras vidas, en todos los òrdenes. Sin
embargo, queda demostrado que lo màs perjudicial para estos sectores, es
el crecimiento de imagen en los ùltimos dos meses, tanto de la
presidenta, como del Ministro Kicillof y las decisiones del gobierno,
fundamentalmente, por la lucha incesante con los fondos buitre y la
forma que lo encara el gobierno nacional. Estas encuestas, que no estàn
realizadas por sectores afines al kirchnerismo, todo lo contrario, està
confeccionada por consultoras opositoras al gobierno, pone muy nerviosos
a los opositores, que estaban sacando cuenta quizàs, con mucho
adelantamiento, de los pròximas elecciones, creyendo que el gobierno se
cae a pedazos, teniendo la mesa servida para hacerse cargo en diciembre
del 2015, mientras que la realidad presenta otra cosa, màs aùn, cuando
se acaba de resolver favorablemente el tema del salario mìnimo y los
aumentos a jubilados y pensionados, que supera ampliamente la inflaciòn
anual. Fìjense, hasta dònde llega la preocupaciòn de los sectores
dominantes, si los mismos diarios hegemònicos, caso concreto La Naciòn y
Clarìn, ocultaron visiblemente en sus tapas, dichos aumentos a los
trabajadores y a la sociedad pasiva, poniendo mayor ènfasis, en el
aumento a las naftas, la presunta fuerte caìda de los puestos de trabajo
y el aumento del dòlar ilegal, todo esto para manipular a la opiniòn
pùblica, crear la desconfianza y producir miedo en la comunidad, algo
similar a etapas anteriores, con gobiernos que no eran de apetencias de
los dominantes corportivistas, como lo ejecutaron con el peronismo de
los 70 y con Raùl Alfonsìn a fines de los 80.. Muy triste desde ya
estas formas de proceder de cierto sector de la vida argentina, pero que
nos hace reflexionar, para no caer en trampas, como lo vengo anunciando
dìa a dìa en mis editoriales. ¡A no dormirse, es una hora crucial y no
tenemos que estar desprevenidos!
|
|