ABRAN LOS OJOS, NO JUEGUEN PARA LOS CORPORATIVISTAS

 Difìcilmente quien escribe estas editoriales, alguna vez estè en contra de las luchas sindicales o las reivindicaciones de los trabajadores, toda mi vida estuve del lado o desde el espacio del trabajador, pero existen algunas ocasiones que uno debe saber en realidad, cuàles son las intenciones de cada dirigente sindical y a que apuesta, cuando inicia una lucha reivindicativa, supuestamente a favor del sector obrero. La peticiòn que vienen manteniendo desde hace algùn escaso tiempo, con relaciòn a un bono para fin de año, para otorgarle a todos los sectores productivos del trabajo, que oscila entre 3 a 4 mil pesos, no deja de sorprenderme, teniendo en cuenta las argumentaciones que difunden algunos dirigentes o seudos conductores de los sindicatos nacionales. Ahì aparecen e incluyo a personajes como Hugo Yasky o Antonio Calò, que son afines incluso, al gobierno nacional.

Sinceramente, segùn mi humilde òptica, carecen de fundamentos bàsicos, por varios motivos que estàn a la vista de cualquier ciudadano que se considere racional e inteligente, porque estàn muy lejos de una realidad y no ostentan contenidos sostenibles para tales argumentos. Si los motivos tienen que ver con la canasta familiar de fin de año, por las fiestas tradicionales, es una actitud descabellada, pensar que se necesitan esos dineros para completar una canasta bàsica. Si los argumentos pasan por una inflaciòn galopante como nos quieren hacer creer las consultoras privadas o agunos diputados actuales que desde el Congreso Nacional, pretenden hacer correr una inflaciòn que no tienen ni sustentos, ni seriedad, porque toman como premisa los precios de los grandes supermercados o sòlamente toman como referencia la Capital Federal y el Conurbano Bonaerense, tampoco son vàlidos, fundamentalmente, por estar manejados por los medios hegemònicos, seriamente comprometidos con las estafas al paìs, de acuerdo a las recientes investigaciones y denuncias que saltan desde la AFIP, donde se han comprobado la evasiòn de màs de 400 mil millones en los ùltimos 20 años. Si insisten con la eliminaciòn del Impuesto a las Ganancias, quiero manifestarle que no han tenido la misma actitud contra Menem y De la Rùa, pero si lo hacen con un gobierno nacional y popular que les devolviò la sonrisa en los ùltimos años, ni tampoco los veo haciendo escraches contra los jueces, por ser los priviligiados que no pagan el citado impuesto.

Con cierto dolor, tambièn tengo que manifestar que estos mismos dirigentes, que se creen ser salvadores de la clase obrera, hicieron silencio en los 90 con el gobierno de Carlos Menem y jamàs defendieron a los jubilados o sino que lo digan los familiares de Norma Plà, aquella luchadora acèrrima contra el neoliberalismo comandado por el citado Menem y Domingo Cavallo, quienes nos dejaron en la vìa y con una deuda externa que todavìa estamos pagando. Incluso, la diputada Patricia Bulrrich que se dio el lujo de aceptar la propuesta del citado Cavallo, achicando el haber jubilatario hace unos 13 años, por un 13% que dejò en la ruina y con hambre y pobreza a todos nuestros abuelos.

Esos sindicalistas no salieron a defender los salarios por aquellos atropellos del sector dominante, ni tampoco los veo hoy, en la calle defendiendo como se debe, como la hace la militancia juvenil, en los Precios Cuidados, movilizando a todo el sector dirigencial y de base de nuestro sindicalismo, no para formar patotas y saqueos en los supermercados, sino para salir a defender y denunciar a estos sectores priviligiados que nos desean llevar nuevamente a las dècadas infames.

Tampoco los veo trabajando en las zonas inundadas para colobaror o prestar ayuda a los sectores màs vulneables que han perdido todo por los siniestros ocurridos. Menos aùn, salen a defender la postura de soberanìa que impulsa el gobierno nacional, en contra de los fondos buitre, que desean fervorozamente, llevar al paìs al desastre total de aquellos nefastos tiempos del neoliberalismo.

No les veo quejarse contra los medios de comunicaciòn masivo, que en el desastre ocurrido en estas ùltimas horas en Arrecifes, no mostraban a las familias que han perdido sus pertenencias, con todo el dolor y angustia que significa eso, pero si estaban preocupados por la familia del corredor Marcos Di Palma, la cual me merece todo el respeto, pero sòlo mostraban sus lujosos autos, sus aviones privados y sus lujosas mansiones que habìan sido destruìdas por la tormenta, pero no fueron a ver que pasaba con los sectores màs vulnerables de nuestra sociedad, aquellos que siempre, son atendidos por el Estado y no por los poderosos, pero pareciera que nuestros sindicalistas, tienen otras preocupaciones, algo que està en manos, precisamente de los jòvenes millitantes de distintos partidos polìticos, que estàn siempre del lado de la màs humildes, lo digo por algunas fracciones del radicalismo, socialismo, incluso del PRO, juntamente con La Càmpora, que vienen trabajando asiduamente, ayudando a los màs carenciados, algo que sin duda, nace desde mayo del 2003, con aquel legado que les dejara Nèstor Kirchner, el mismo que "tolerò" a ciertos sindicalistas que traicionan hoy aquel legado y juegan abiertamente para los sectores màs poderosos del mercantilismo salvaje del mundo moderno.

Mis queridos compañeros, sòlo les pido que reflexionen, no tiren del carro, porque siempre salen favorecidos los sectores dominantes y el paìs, ya no està para soportar nuevos derrumbes, llegò la hora de arremangarse de todos lados y "laburar" para el paìs. ¿No les parece?