A SEIS DÉCADAS DE ÉSE ACTO CRIMINAL, ES NECESARIO TRAERLO EN EL RECUERDO

Aquel 16 de junio de 1955, la Armada Argentina, conjuntamente con la Fuerza Aérea, programaban un bautismo de vuelo por sobre la Catedral de Buenos Aires, algo totalmente falso, de acuerdo a lo sucedido a pocos minutos de iniciar dicho evento, ya que en esa mañana con intensa niebla, desviaron el recorrido hacia las aguas del Río de la Plata, y ante la confusión general, comenzaron a bombardear la Casa Rosada en plena Plaza de Mayo, ocasionando más de 370 muertes de compatriotas, con el sólo objetivo de derrocar el gobierno de Juan Domingo Perón, incluyendo su asesinato, algo similar de lo que iba a ocurrir 18 años después en Chile con Salvador Allende. Si se compara con aquel ataque de Alemania al pueblo de Guernica en España, donde utilizaron 28 toneladas de bombas, nos damos cuenta que ése acto criminal ocurrido en nuestra plaza del pueblo, fue uno de los más impresionantes de la historia latinoamericana, algo razonable la calificación, si se tiene en cuenta que en el bombardeo de Plaza de Mayo, utilizaron unas 16 toneladas de bomba, para "combatir" a un gobierno que no satisfacía sus necesidades y privilegios, pero con el agravante que se ejecutaba contra sus propios compatriotas. Cabe señalar el fuerte apoyo de políticos opositores, caso concreto, Miguel Zabala Ortíz de la UCR o Américo Ghioldi del Partido Socialista, éste último exiliado en Uruguay en ése entonces.

Claro, hoy a 60 años estas cosas por el gran esfuerzo de estos últimos 33 años de democracia, con otros actores y un gran compromiso de la sociedad argentina en su conjunto, más la modificación estricta de los poderes, en no apoyar golpes de estado de tipo castrense, es indudable que las cosas han cambiado para bien, pero no es descabellado traer en el recuerdo aquel acto criminal, porque analizando cada caso, no sólo en nuestro país, sino en todo el continente, es notorio que se intentan activar cualquier tipo de acciones que desestabilice a los gobiernos populares y de neto corte inclusivo a la sociedad. Hoy las bombas no son de plomo y pólvora, son psicológicas, entrando en el mundo económico y utilizando minuto a minuto los medios de comunicación, creando mentiras y tergiversaciones de la palabra, para confundir a una sociedad, con el sólo propósito de volver a los 90 o aquellos años de la década del 30, que enseñaron a los principiantes políticos, cuál era el camino para obtener el poder, siempre estando del lado, precisamente de los poderosos, apoyando y trabajando activamente para que estos obtengan claramente sus objetivos.

El mundo ha cambiado, la militancia joven va modificando estructuralmente los caminos de la militancia política-social, por ello, es muy importante traer en el recuerdo aquellos actos asesinos de los hombres que trabajaban en contra de los intereses propios de su país, para no volver a caer en sus garras y analizar profundamente, cuando nos toca elegir un candidato que conduzca los destinos del país.

Nuestro más sincero reconocimiento para todos aquellos que perdieron la vida en aquel 16 de Junio del 55 y vaya también nuestro homenaje a los familiares y amigos que aún quedan de esas víctimas, asesinadas brutalmente por los enemigos de la patria del plomo y pólvora, pero que han dejado a sus discípulos con otras metodologías, pero siempre en contra de sus hermanos y de la patria.