EL TÚNEL DEL TIEMPO EQUIVOCADO PARA VARGAS LLOSA

La presentación de Vargas Llosa en la feria del Libro y en las distintas notas que le hicieran en algunos medios, muestra una vez más las notables contradicciones  del último Nobel de la Literatura, algo previsible y razonable en los seres humanos, pero no se puede concebir que sean tantas, sobre todo cuando se habla de política y de la ideología completa de una persona.
El personaje aludido que no le esquivó a nada de lo que se le preguntara, algo que se puede comprobar en Página 12 (por ejemplo) donde apuntó algunas ideas sobre Von Hayek y Friedman, modelos de la ultraderecha que le dieron un apoyo irrestricto al dictador Pinochet, y además el escrito continuó la defensa de algunos modelos como el de Lula, Piñera, Uribe, Alan García, etc., etc. Sin embargo cuando se le preguntó, cual sería su posición de voto en la segunda vuelta peruana en el mes de junio, manifestó que le daría el sufragio a Ollanta Humala, porque era evidente que no estaba en contra de las causas populares, algo que si, mantiene la familia  del ex dictador Alberto Fujimori, con todos los antecedentes cercanos y la situación carcelaria del ex presidente por la corrupción y entrega del patrimonio  de su país. Pero jamás tuvo complacencia con Argentina, dejando en evidencia que según su óptica, es un país atrasado, sumergido en la pobreza y el analfabetismo, ponderando lo que significaba nuestro terruño  a principios del siglo 20, cuando Argentina era uno de las países más cultos y formados del mundo en cuanto a educación y salud, en contraposición con la vieja Europa que tenía casi dos tercios de analfabetos. Resaltó lo que era nuestro suelo en esas épocas, dejando de manifiesto que la presencia del peronismo atrasó totalmente al país y que los resultados están a la vista, siendo (reitero, según su mirada)  hoy una de las regiones más empobrecidas del planeta, tanto cultural como intelectualmente hablando.
Tenemos que darle la razón  a Vargas Llosa en esta postura, pero es muy evidente que se le han trastocado los almanaques y de la misma manera que escribe en la actualidad, se ha quedado en el tiempo y la falla totalmente el túnel donde se inserta para revolver la historia.
La Argentina que él critica, cuando habla de la pobreza de todo tipo, quedó enterrada a mediados de la década anterior, y también había quedado de la misma forma a mediados de la década del 40, aquella época que critica constantemente cuando desea menoscabar la presencia importante del peronismo para transformar y mitigar los males de la república. Los que arruinaron el país fueron los que aparecieron desde el 55 hasta mediados de la década de los 80, pero como no se resignaban en la búsqueda del recupero de sus logros, volvieron en los 90 con el modelo que el escritor peruano pondera y además, está muy deseosos que vuelvan al poder.
Menciono que desordena las épocas y se confunde con los almanaques, ya que no deseo ser un contradictor nato y me quedo con la impresión, que tal vez por sus años y sus continuos viajes, ha perdido la razón del tiempo y la distancia.
Lo que si queda claro, son sus notables contradicciones, porque le da lo mismo votar a Ollanta, como apoyar a Alan García y a Uribe; en los 60 era defensor de Fidel y el Che y hoy desea que en nuestro país vuelva el neoliberalismo de Menem, incluso votaría por Humala, pero reniega del “populismo" de los Kirchner a quienes los cataloga de incultos e incapaces, es más ,con evidente malicia señaló que ahora hay uno solo, en franca alusión a la muerte de Néstor.
Pero lo más saludable de todo esto, es la libertad de expresión que tuvo en el país, cuando esperaba seguramente algún “piquete” que lo defenestrara y agrediera, para sacar provecho, no sólo él, sino toda la “Corpo” mediática para llenar sus páginas con algo que la sociedad argentina, no quiere ni busca. Se movió libremente "como pez en el agua", tal vez alusivamente en concordancia con uno de sus títulos literarios.
Lo que le pedimos tal vez, para la próxima visita al Nobel de Literatura, es que maneje bien los tiempos y revise concienzudamente las fechas que menciona, porque está viajando por el túnel del tiempo equivocado.