Hoy: Voy a sincerarme, diré lo que pienso del presidente...

Habitualmente, los que siguen mis editoriales desde hace algunos años en NUEVO PAÍS, saben que no utilizo palabras obscenas  o puedo inquietar a alguien con calificaciones no usadas asiduamente por los periodistas, salvo excepciones que pertenecen al grupo hegemónico de los medios, que se han dado el lujo de ofender gratuitamente a muchos personajes de la vida política, judicial o social en su conjunto, a través de sus cámaras o micrófonos. Pero tengo que decirlos sin tapujos, cuando tengo que opinar sobre el presidente Mauricio Macri y no precisamente, utilizando palabras del conocido periodista y analista político y económico, Roberto Navarro, cuando dice que que Macri "nos está tomando por boludos", algo que no deja de ser atendible, sin embargo creo que es a la inversa, él (Macri) es un boludo importante y no tiene la menor idea de cómo debe ejecutarse la política y todo lo que hace, es por instrucción directa de los Estados Unidos y los poderes centrales del mundo financiero concentrado y no, porque tenga alguna vaga idea de lo que significa una política de estado. Lo digo y certifico sin ninguna duda al respecto y los hechos cotidianos, dejan un margen perfecto para analizarlo y darse cuenta de que es literalmente así, ya que no ha podido en sus 7 meses y días de gobierno, poder aclarar algo de lo que pretende y debe rectificarse cada 24 horas de cada "decisión" que toma porque no pega una. Encomillo la palabra decisión, simplemente, por tener bien claro que esas decisiones que pueda llegar a tomar, no salen de sus neuronas, son directivas claras del FMI; los Estados Unidos y los sectores corporativos de la economía especultativa, sin importarles a estos sujetos, si puede tener éxito o no en tales gestiones propuestas. Entonces, cuando Macri observa una reacción popular, comienza a temer y gira en 180 grados en sus decisiones.
Considero que todo éste análisis no se puede hacer en una sóla versión, por ello he decidio ejecutar el mismo en varios capítulos, que escribiré cada 48 horas, dándole el tiempo suficiente para que usted amigo lector, analice con tranquilidad cada palabra que vierto, porque mi interés personal, es que tenga un panorama esclarecedor con todo lo que está pasando en el país y la región.
Comienzo con aquellas palabras de Juan Domingo Perón, que las reproduzco hasta el hartazgo, simplemente para que tenga en claro hacia dónde se debe dirigir un país en política, si se tiene en transparencia cuáles son los objetivos básicos para que le otorguen bienestar a su sociedad. Esas palabras de Perón decían: "Para ejecutar políticas en un país, primero hay que dejarse de mirar su ombligo y mirar el contexto internacional, para saber que está pasando en el planeta". Pensamiento vital  y maravilloso que deja una enseñanaza para todos aquellos que están dentro de éste noble rubro.
Macri no tiene ni idea de lo que significa la política local, ni el contexto internacional, por lo tanto, como es un hijo de empresario famoso y exitoso, llegó a participar en política, llevado por las corporaciones para ser un títere de ellas y poner en práctica las decisiones imperiales, tal como lo han hecho en México con Peña Nieto o lo han intentado hasta hoy con Capriles en Venezuela sin éxito. Pero cuando debemos analizar su participación como empresario, todo lo que dejó en el camino ha sido negativo y las empresas sin posibilidades de tener éxito han quedado destruídas y vaciadas, al mejor estilo neoliberal. Y manifiesto de tal manera el párrafo actual, porque estoy convencido que él, como empresario ha sido y es un fracaso y todo lo que obtuvo en ésa disciplina se debió a su padre y no por sus cometidos, ya que todo lo que tocó, lo destruyó, o sino miremos hacia Sevel o el Correo Argentino, como ejemplos concretos.
Claro, cuando tenemos que involucrarlo en política internacional y analizar cuáles fueron los atributos que observaron los popes universales del mundo financiero para llevarlo a la presidencia de nuestro pais, tenemos ante nuestros ojos la imagen del boludo importante que necesitan dichos personajes, para manejarlos con total facilidad y ponerles a "su servicio" a los colaboradores inmediatos que integren el gabinete de ministros y, vaya si lo han realizado con éxito los que llevaron a Macri a la Casa Rosada, ya que el 90% de su gabinete esá compuesto por empresarios de multinacionales, salvo el ministro del Interior, Rogelio Frigerio, que fue nombrado por decisión de Héctor Magnetto, por ser el nombrado ministro, heredero directo de la fortuna de Roberto Noble, el creador del Grupo Clarín. ¿Lo sabía? Bueno, ahora lo sabe. Además, Magnetto, hombre fuerte desgraciadamente de nuestro país, no se decidió por casualidad en la figura de Frigerio, lo conoce como el hombre más probo en política del PRO, pero para acompañar tal misión y ante peligros que puedan existir en las decisiones, también se dio el lujo de nombrar a los dos jueces de la Corte Suprema para tener el poder absoluto.
Bueno, ya tiene un panorama más esclarecedor de la llegada de Mauricio Macri al gobierno, ahora en las siguientes entregas iré desmenuzando cada uno de los temas y se darán cuenta de la ingerencia norteamericana en nuestro país y como viene el andamiaje internacional para saber en dónde estamos parados los argentinos y la región continental, con estas políticas que nos quieren imponer nuevamente.
¡Hasta la próxima!