Hoy: La interpretación del diccionario sobre "derechas e izquierdas"

 Cuando les escribía semanas atrás sobre el "Nuevo Consenso de Washington", sin dudas lo estaba haciendo para buscar una forma aclaratoria de todo lo que está sucediendo en el sur de América y me imagino, que a usted le está pasando lo mismo, desea fervorozamente saber porqué nos pasa en estos momentos semejantes situaciones que nos hace descreer en cierto modo de todo el sistema democrático. El crecimiento económico sostenido y de bienestar en las poblaciones en la última década en cada país hermano del continente, ponía muy nerviosos a los mercaderes corporativos y la palabra progresismo significaba algo muy perjudicatorio para el sistema que ellos deseaban ejecutar en nuestro territorio. El llamado "populismo" por los popes de la derecha no satisfacía sus necesidades y había que provocar situaciones conflictivas en las sociedades para que les posibilitara el regreso ansiado después del desastre provocado en los 90. ¡Vaya si lo vienen logrando! Con sólo revisar lo que ha pasado en Paraguay, Perú, México, Brasil, Argentina y con mayor ahínco actualmente en Venezuela, basta para darse cuenta que intentan desestabilizar cualquier proceso democrático medianamente exitoso.
Con sólo interpretar lo que significa la palabra "derecha" e "izquierda" según la apreciación del diccionario de lengua española, permite darse cuenta de todo lo que aconteció a través del tiempo y hasta nuestros días. Para aquellos que oportunamente hace siglos escribieran e interpretaran cada palabra, como si fuesen los dueños de la verdad, bastaba para que los que se oponían a tales conceptos lo iban a pasar muy mal, además, siempre con la supervisión y aprobación de la iglesia católica como institución protectora.
Usted ingresa a un diccionario y puede leer que la palabra "derecha" para los inventores, significaba lisa y llanamente, el orden, las buenas costumbres y otras yerbas sobre el bienestar, tal es así que la denominaban "la diestra", mientras que la "izquierda", era la rebelde, la que se oponía precisamente a esas "buenas costumbres" que pregonaban, por lo tanto no era extraño que la denominaran "la siniestra". ¿Les queda claro?
A través de ése concepto de cada palabra mencionada, fueron adoctrinando y disciplinando a toda una sociedad que tal vez nunca pudo comprender ciertamente los contenidos de dichas palabras, ya que en las escuelas, como era previsible, también enseñaban sobre el significado de las mismas, de acuerdo al objetivo de los difundidores o creadores de esos diccionarios que nos "sirvieron" para educarnos.
Hoy más que nunca vemos que nos quieren disciplinar con tales conceptos y cada ser humano que se cuadre de una forma adversa a los contextos pertinentes, será motivo de represión, cárcel y porqué no, muerte, si estos sujetos del poder consideran que perjudican "las buenas costumbres". Entonces, explica perfectamente porqué está presa Milagro Sala; porqué es considerado un enemigo Roberto Baradel y desde ya los chicos de La Cámpora o cualquier otra fracción política integrada por jóvenes, aparecen como posibles subversivos o sino, lo califican como vagos que intentan vivir del estado. Precisamente, todo lo que dicen de los mencionados, es lo que representan y ejecutan ellos, con enormes hechos corruptivos por todos los rincones, sin embargo, la justicia intenta cerrar rápidamente cualquier causa que se les aparece en sus contras, sin embargo llevan años algunas que no tienen asidero, y que todavía esperan juicio oral, pero al no tener pruebas, continúan inmóviles en los juzgados, casos concretos: Causa de Ciccone sobre Amnado Boudou; las causas de la efedrina y el triple crimen de Gral. Rodriguez contra Aníbal Fernández y innumerables denuncias y causas abiertas contra Cristina Fernández de Kirchner, que todavía no pueden llevarla a juicio, precisamente, por caracer de pruebas.
Esta es una de las formas claras que siempre la derecha recalcitrante ha ejecutado para mantener el poder y lograr la sumisión a ellos de nuestra parte durante toda la vida y ahí aparece esa falsa premisa de Mauricio Macri u otro presidente del continente que vienen a unir a la sociedad, es totalmente mentira esa apreciación o discurso que nos venden, por tal causa van a acrecentar toda medida represora sobre cualquier ciudadano que se les cuadre para cambiar la historia. Siempre vamos a aparecer como "enemigos del orden" y nos van a querer callar. Por todo eso, uno sugiere a cada uno de los lectores que medite, que tome en serio todo lo que les vengo pronunciando en cada nota y mantengámos la tranquilidad, pero con energía para salir de todo esto, con suma inteligencia. Ya en el último capítulo que les ofreceré el próximo martes, usted tendrá otras herramientas para poner en práctica, todo este esfuerzo es para lograr una victoria verdadera y sostenida, que no sólo pasa por las urnas y ganar una elección. ¿Se entiende? ¡HLVS!