Señor Presidente:

En notas anteriores le manifestaba mi enorme preocupación por la forma que se conduce hacia todo el pueblo argentino (palabra que usted nunca pronuncia) pues deja la sensación de faltarle el respeto, desconsiderando abiertamente todas las conquistas sociales logradas, como si se trataran de dádivas ofertadas por los gobiernos que no son afines a su forma de pensar. Tengo en mi cabeza la idea de que usted no puede diferenciar a los sectores vulnerables o más pobres, con la clase social que ostenta, de la cual se siente orgulloso, ya que resulta inadmisible que día a día, le quita las necesidades básicas al sector menos pudiente y se las transfiere a aquellos que lo tienen todo y poco han otorgado a la patria.
Sin embargo, hoy le agrega como si nada ocurriera en nuestro castigado país, otras consignas que estaban en su viejo libreto conservador o oligárquico y que lo pone en ejecución, simplemente para agigantar el poder de unos pocos en desmedro de esos seres más necesitados de nuestro territorio. Esas premisas están orientadas a perseguir a todo ser que no piensa como ustedes y los califican como enemigos que ponen "palos en la rueda", como acostumbra a decirnos en cada discurso.
Vayamos por parte señor Presidente, para que tenga en claro el mensaje y las observaciones que deseo transmitirle a través de estas líneas, como un simple ciudadano común:
1) Todas las promesas electorales realizadas por usted, han sido una cruel mentira, ya que no pudo cumplir ninguna de las que estaban en su libreta de apuntes y si tiene alguna duda paso a enumerarlas:
a) La pobreza cero, máxima consigna de su campaña, se ha convertido en todo lo contrario, algo que usted mismo lo acaba de ratificar en Jujuy, prometiéndonos una vez más, que recién en el año 2020 se podrá conseguir algo de tales promesas.
b) La infación era algo que resolvería "de taquito", pues de no conseguirlo sería un fracaso de su gobierno. ¿Que le pasó que le erró tan fiero?
c) El dólar no era un problema, pues una vez que fluctuara, el mercado lo asimilaría e iba a tener una estabilidad duradera. Le recuerdo que lo "heredó" a $ 9,62 y hoy pasó la barrera de los 30 pesos. ¡Que mala jugada! ¿No?
d) En su gobierno no existirían los jueces o fiscales macristas y no interferiría en cuestiones de índole judicial, pues iba a respetar la división de poderes. ¿Quiere que le publique la lista de jueces y fiscales separados de sus cargos en su gestión?
2) Las libertades públicas era otra de las promesas que instaló en su campaña proselitista, pues aquí paso a comentarle que ha sido otra de sus grandes mentiras:
a) En su gobierno ya ha acumulado más de 30 perseguidos y presos políticos, con el agravante de ostentar 2 muertes innecesarias (Santiago Maldonado y Rafael Nahuel) cruelmente asesinados por las fuerzas de seguridad bajo la responsabilidad de su ministra Patricia Bullrich y la suya propia.
b) Agreguemos la falta de reponsabilidad por la desaparición del Ara San Juan con sus 44 tripulantes, donde tuvimos que esperar 8 meses para que se realice la búsqueda como lo desea saber todo un pueblo, de acuerdo a lo anunciado por usted en estos días.
c) Algunos periodistas tuvieron que dejar su trabajo por "sugerencia" de su persona, lo cual fue aceptado sin tapujos por parte de los mandamases de la comunicación, agregando que los dueños de C5N y Radio 10 están presos porque usted sin ponerse colorado dijo alguna vez "esto no fue lo que hemos acordado" (con la justicia por supuesto) al igual que la libertad de otros funcionarios kirchneristas, los cuales fueron nuevamente a prisión por el "apriete" presidencial.¿Dónde quedó la libertad de prensa y la no interferencia en la justicia anunciada por usted?
d) El bochornoso caso de los aportantes "truchos" y las afiliaciones apócrifas en el PRO, sumado a los "arrepentidos" empresarios y ex funcionarios kirchneristas, toda una maraña cinematográfica, que ya pocos argentinos/as pueden creer y a su vez soportar. ¡No es ésta la forma de hacer política, Señor Presidente!
e) Ahora para callarnos y adoctrinarnos, como en la etapa más nefasta de nuestra historia, pone a los militares en las calles, violando la constitución y los tratados internacionales que están incluídos en la carta magna.
En fin, Presidente, no alcanzaría ni el tiempo, ni el espacio para hacerle saber sobre todo el malestar que hoy vive el pueblo argentino, por las mentiras expuestas a lo largo de estos 32 meses de su gobierno, de acuerdo a todo lo que prometió en etapas pre-electorales. Por lo tanto, para finalizar sugiero que cambie o modifique en algo su accionar gubernamental y piense abierta y honestamente en ésta sociedad que espera recuperar aquella década que usted y su equipo, considera la peor de la historia nacional.
Digo todo esto simplemente, porque está todo a la vista, salvo que usted no desea verlo, teniendo en cuenta que nuestra sociedad hace apenas 3 años vivía decentemente y con dignidad y no era una fiesta la que estaba viviendo, era simplemente el resultado de políticas públicas inclusivas que le devolvían al pueblo, todo lo que éste le daba a la patria, algo que hoy no lo pude repetir, precisamente, debido a esas políticas ejecutadas por su gobierno. Recorriendo el país, seguramente va a encontrar todo ése dinero que presuntamente para ustedes están en los bolsos de dinero robado, creo que es todo lo adverso, esos dineros del pueblo, están en obras, en más de 1700 escuelas; 121 hospitales; 43 universidades públicas y miles de kilómetros de rutas y autopistas realizadas por los gobiernos anteriores, entre otras obras de magnitud.
Deje de atacar a los movimientos populares porque estos son los que van a devolvernos la dignidad, con ustedes solo nos queda el remate al mejor postor y la barbarie.
Todo esto se lo digo, señor Presidente, desde lo más pofundo de mis vísceras y espero que termine su mandato, pero que nos deje llegar a tiempo, como dice el tema de la española Rosana, para que nuestro querido y bendito país no se hunda como el Ara San Juan.
¡Hasta la Victoria Final!
Atentamente
Gerardo Bova
Historiador-Periodista-Escritor
Director General
RevistaNuevoPais