CONCLUSIONES: NO HAY PEOR TRAICIÓN, QUE TENER UN ENEMIGO INTERNO

Culmino hoy con esta serie de notas, relacionadas con el comportamiento del Grupo Clarín con los intereses del país.
Considero que los contenidos que aporté en este espacio, son harto elocuentes, como para obtener una conclusión certera sobre la actuación del Grupo en cuestión.
Los datos aportados sobre las mineras a cielo abierto; la participación de José Aranda sobre el tema sojero y los perjuicios para el medio ambiente; la vinculación con las petroleras; la inserción del grupo en la fuga de capitales, donde han sido socios y cómplices en muchos casos, sin haber incluido la participación activa en los dividendos de acciones de las AFJP de parte de este Grupo, que ocasionó una pérdida, no sólo al estado, también a los beneficiarios directos de esas jubilaciones privadas, en unos 485 millones de pesos, terminando con la apropiación de Papel Prensa a punta de pistola, creo que dejan con claridad, cuáles son los manejos e intereses del Grupo. Esto que está sucediendo, no significa una guerra entre el gobierno y el mandamás del Grupo, Héctor Magnetto,  simplemente son sucesos inocultables que demuestran claramente, que el odio o ansias de revancha, viene del otro sector y no del parte del Ejecutivo Nacional.
Cada acto o participación de Clarín, que tenga ingerencia en la vida nacional, pone en evidencia las intenciones del grupo, que no solo desea imponer nuevamente el sistema del “libre mercado”, además busca las alternativas viables o no, para producir acciones inconstitucionales, con tal de lograr sus objetivos, aunque en las columnas de opinión, intente demostrar lo contrario.
Si nos detenemos a analizar la forma de proceder del Grupo, con relación a esa disputa que tiene contra un modelo de inclusión social, sea cual fuere el que conduzca el modelo, pueden ser los Kirchner, Chávez, Correa, Lugo o Dilma, simplemente, observaremos las respuestas inmediatas, que están dispuestos a atacar a la columna vertebral del modelo en sí, sea en Argentina, Brasil, Ecuador, Paraguay o Venezuela.
Sin desmerecer las funciones que puedan desarrollar algunos funcionarios del primer nivel del gobierno, hablando del caso argentino, a manera de ejemplo, puedo mencionar a Florencio Randazzo, Arturo Puricelli o el actual Ministro de Economía Hernán Lorenzino, el ataque está centrado a los puntos claves que destacan al gobierno, y que sin dudas, Clarín busca desprestigiar y comprometer, según su criterio, por falta de capacidad, compromiso, e incluso en actos presuntamente delictivos.
No resulta casual que atribuyan un poder que no posee a Guillermo Moreno (sólo recibe instrucciones de Cristina) por la falta de insumos de importación, o por su ingerencia en empresas privadas, desconociendo la participación estatal (casos Papel Prensa y Siderar); la función de Nilda Garré, no solo por la responsabilidad en la seguridad, como si fuera garante de los delitos y estos hayan comenzado en la era kirchnerista, incluso la involucran en el tema desgraciado de la Estación Once, como si fuera la responsable del hecho en sí.
Cuestionar fuertemente a De Vido por el uso indiscrecional de los fondos públicos destinados a obras para la sociedad toda, “aclarando” siempre que lo utilizado por el Ministro de Planificación, se llama “caja” y no recursos del Estado.
Ahora se dedican día a día al vicepresidente Amado Boudou, por su posible vinculación al Grupo Ciccone, a quienes denominan incansablemente, “La Imprenta más importante y poderosa del país”, cuando en realidad, esa atribución o calificación, le corresponde a ellos (Papel Prensa) por el manejo dictatorial del papel, no permitiendo la libre expresión.
Pues bien, deténgase amigo lector a reflexionar y analizar muy detalladamente a quienes atacan: Las personas de mayor confianza de la presidenta y las que ejecutan las políticas instruidas desde la figura central de Cristina Fernández, en todos los niveles más sobresalientes. Es más, se “preocupan” por la fuerte participación en los lugares claves y con profundización aumentativa, del grupo de jóvenes de La Cámpora, casualmente ideada y estimulada por Máximo, el hijo del matrimonio Kirchner.
Lo cierto es, que de Guillermo Moreno, solo pueden atribuirle el mote de “Patotero”, algo que no es, por cierto, pero jamás podrán encontrarle un acto delictivo, sencillamente, por que es incorruptible y esto les causa malestar al Grupo hegemónico.
Lo mismo se puede argumentar de Nilda Garré, la califican de montonera, ex guerrillera, etc. Pero tampoco pueden imputarle una acción delictiva.
Con De Vido, la situación es distinta, pero intentan incorporarlo en cualquier movimiento vinculado en coimas, malversación de fondos, pero lo que sucede, que cada obra emprendida por el gobierno y que sale a la circulación, en poco tiempo se concreta y los argumentos destructivos de Clarín, desaparecen, de cualquier forma se “iluminan” para involucrar al Ministro en algo que al tiempo se diluye, al no encontrarse motivos de imputaciones. Claro, jamás el diario en cuestión, va a reconocer el error y nadie se entera de los cambios.
Con Boudou, es algo muy raro lo que está aconteciendo y seguramente en la brevedad quedará resuelto, ya que las declaraciones de la madre de Laura Muñoz, la denunciante sobre el tema que está en circulación, la compromete muchísimo, pues declaró que Laura sufre de paranoia y sus estados de ánimo, además de resultar cambiantes, es indudable que se trata de una venganza con su ex marido y Boudou, aparece allí no solo de casualidad, tal vez tenga la misma dimensión de lo que sucedió con la causa de papel Prensa, cuando declaró el hermano de Graiver, y al poco tiempo de su indagatoria, desapareció totalmente de la escena. Creo que estamos en un hecho muy similar y no tengo dudas, que en pocos meses, la señora Muñoz estará fuera de los ámbitos de la causa. Ah! Algo importante para destacar: sobre la declaración de la madre de Laura Muñoz, Clarín no publicó ni una sola línea. ¿Raro no?
A pesar de todo lo que manifesté, desde este espacio no promuevo el alejamiento con Clarín, al contrario, deseo que todos los días podamos leer este diario, como también a todos los restantes para hacer los cotejos indispensables y necesarios, para darnos cuenta quienes nos mienten.
No dudo en absoluto que a la brevedad, tendremos un panorama distinto y nos informaremos mejor, con el objetivo de saber quienes son los verdaderos enemigos del país.
Como decía Juan Domingo Perón, tenemos que cuidarnos de los enemigos externos y eso resulta natural, pero son más peligrosos los enemigos internos.
Por ello promuevo en mis talleres parlamentarios en las escuelas, que desde muy pequeños (12 o 13 años de edad) los alumnos lean, al menos una vez por semana en clases, todos los diarios, eligiendo algunas notas sobresalientes, donde se puedan cotejar las distintas opiniones, para sacar conclusiones sobre ellas. Hay que formarlos de alguna manera, para que no sean engañados intelectualmente, sobre todo, tomando como base que son los futuros ciudadanos que votarán en el país.