SON MUCHOS TODAVÍA, LOS QUE PREFIEREN DESVIAR EL CAUCE DE LA REALIDAD EN ARGENTINA

Luego del discurso de la presidenta en la Sesión Inaugural de la 130 Asamblea Legislativa de apertura de Ordinarias en el Congreso de La  Nación, las opiniones difundidas por periodistas y politólogos de distintos medios, fueron muy ajenas, realmente, a lo que Cristina Fernández expuso.
Cuesta creer que todavía, algunos personajes de nuestro periodismo, con tantos años de profesión y vinculación con la política en Argentina, puedan desviarse de lo real, e intenten hacer creer a la sociedad, que estos discursos que viene desarrollando año tras año, nuestra presidenta, carezca de contenidos y que solamente cumplen con lo protocolar, que son extensos y que solo sirve para difundir obras del gobierno, que según la opinión de ellos, todo el mundo conoce. Bien, vayamos por parte para obtener una conclusión coherente y racional. La presidenta no hizo otra cosa, que cumplir con lo que está estipulado en la Constitución, de que cada 1 de marzo, en la Asamblea Legislativa de apertura de Ordinarias en el Parlamento, la misma tiene que dar a conocer por cadena nacional, todo lo realizado en el año, en su gestión de gobierno, o sea, no significa que hace propaganda de su mandato, tiene la obligación de difundir con números claros y reales.
En segundo lugar, al mencionar temas “picantes” como el caso de los ferrocarriles o el Subte, se supone que debe informar con absoluta claridad, cada paso que se dio en la materia, aunque perjudique a algunos sectores, como sucedió con la Concesión de TBA y el abandono de Macri en la toma de Metrovías.
Lo que sucede, que al mencionar con detalles precisos la situación de ambos temas, el Jefe de Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires, volvió a quedar al descubierto, de su incapacidad y desidia que siente, por las cosas del Estado.
Yo me pregunto a menudo, cuáles son los intereses reales de estos periodistas, porque, en algunos casos, cuando existe algo que favorece al gobierno, omitan dar la publicidad del tema, y cuando hay algo que pueda presentar alguna duda en su cometido, entonces se largan con todo para desprestigiar la acción del gobierno nacional.
Le sugiero que analicen mejor cada noticia y la opinión que esparcen, porque a esta altura de los acontecimientos, después de casi 9 años de gestión kirchnerista, es obvio que es demasiado tarde para seguir mintiendo, porque la sociedad en su gran mayoría,  percibe cuáles son los verdaderos objetivos de los grupos hegemónicos de la información.
Observen hasta donde llega la incapacidad de estos personajes, porque en el caso de Pepe Eliaschev, por ejemplo, se preocupó más por los granaderos que iban por la Avenida 9 de Julio en contramano, en vez de dar una opinión concreta sobre el discurso de Cristina, y en cuanto a la escritora mediática Beatriz Sarlo, lo único que pudo rescatar con mucho odio en su rostro, fue la comparación entre la presidenta y Napoleón Bonaparte,  que según ella, había realizado Cristina en uno de sus párrafos. ¡Patético!