 UN PARTIDO POLÍTICO, SIN POLÍTICOS
Desde ya cada uno de ustedes, cuando les anticipaba que existía un nuevo partido político en Argentina, se daban cuenta que me estaba refiriendo a esta unión de Clarín-La Nación y Perfil, que van actuando en forma despiadada, de acuerdo a como se presentan cada una de las situaciones que nos toca vivir a los argentinos.
Ya no necesitan ir a buscar a dirigentes políticos, que ellos mismos han hecho famosos en los medios, esos medios que les pertenecen y en los programas de mayor audiencia, los levaban para que hablen solamente del libreto que Magnetto les escribía.
Por las dudas y para que esta nota tenga el significado y la importancia que me gustaría que tenga, voy a nombrar a algunos de esos personajes mediáticos que el mandamás de Clarín sacó a la luz, para que sean los voceros de sus intenciones. Recuerden que en una oportunidad comprobada (seguramente hubo otras que no llegó al conocimiento de la opinión pública) muchos de los que voy a mencionar seguidamente, estuvieron almorzando en casa del mismo Magnetto.
Estoy hablando de Eduardo Duhalde, Gerardo Morales, Felipe Solá, Ernesto Sanz, Ricardo Alfonsín, Francisco De Narváez y muchos otros que sin demostrar que estaban a las órdenes del CEO del Grupo en cuestión, han sido cómplices a los intereses de los aludidos, léase Pino Solanas, Hermes Binner, por ejemplo.
Bien, hoy estos personajes no los necesitan, simplemente, por la incapacidad demostrada, además de haberle hecho perder cantidades “industriales” de plata al grupo, porque no cumplieron para nada con las premisas o consignas estipuladas. Se dieron cuenta que el gobierno, después de recibir esa derrota en el 2009 a causa de toda la propaganda mediática por el tema del famoso decreto 125, en vez de ir perdiendo fuerza, fue acumulando una fuerte presencia juvenil y la mayor credibilidad de parte de una sociedad que “olfateaba” la estrategia del Grupo Clarín, para debilitar al gobierno de Cristina y conseguir lo que no se podía con los votos, a través de un golpe económico.
Los resultados están a la vista, ha crecido ostensiblemente el oficialismo en la confiabilidad del pueblo y el Grupo en cuestión, no solo quedó debilitado, también pierde día a día la credibilidad de los mismos que alguna vez fueron apoyados para las campañas mediáticas, entonces comenzaron a cambiar el rumbo y han, o están eligiendo otros senderos, para no quedar “pegados” con semejantes atropellos y mentiras. Algunos de esos personajes que aludo, desean volver a coquetear con las esferas gubernamentales, otros apoyan tímidamente desde afuera y otros prefieren dedicarse a la crítica, pero lejos de los intereses o mandatos del Grupo Clarín. Acorralado por el detrimento de credibilidad y la evidente pérdida en sus cuentas bancarias, los socios de Papel Prensa, han elegido, atacar desde los medios que dirigen, toda iniciativa del gobierno, algo que no sorprende porque lo viene haciendo al poco tiempo que asumiera Néstor Kichner. Pero han cambiado la forma de ataque, buscando la reacción popular, tocando las piezas claves que une al gobierno de Cristina, de esa forma intentan, “cortar las patas de la mesa” kirchnerista, dejando una sensación de inseguridad en todos los órdenes, con el objetivo de que el pueblo reaccione y comience a provocar situaciones de crisis social, que no existen, pero están dedicados a que sucedan.
Como es mi costumbre y para que quede documentado como corresponde, día a día voy a ir puntualizando las acciones concretas y que están plenamente a la vista, de las ideas que ponen en práctica el Grupo hegemónico, con el afán de derrocar a un gobierno popular y retrotraer a la sociedad a las viejas etapas nefastas del neoliberalismo.
Mañana continuaré con esta investigación y los hechos concretos que desnudan las intenciones del Grupo Clarín, comandado por el único responsable de la maniobra, Héctor Magnetto.
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