"MEJOR NO HABLAR DE CIERTAS COSAS"

El tema principal de la semana política en Argentina, volvió a ser, el caso Ciccone, que también tiene ciertas vinculaciones con la empresa Boldt, algo que el grupo mediático que lidera Héctor Magnetto, desea eludir o mejor dicho pasar por alto, simplemente, porque tiene intereses personales con la empresa del juego en la zona del litoral argentino, además de impresiones vinculadas con el tema.

Para tener un panorama más certero y con posibilidades de mayor conocimiento del argumento en cuestión, será necesario transcribir las noticias que se han difundido en los últimos meses sobre este caso, y los pensamientos o palabras vertidas por los involucrados en el asunto. Desde ya, el Grupo Clarín, cuando habla del tema Ciccone, involucra claramente al vice presidente Amado Boudou, pero omite literalmente a la empresa Boldt, que tiene mucha ingerencia en la materia.
Ya es de público conocimiento todo lo sucedido en este caso, desde que Clarín, lanzara una serie de notas sobre la situación de Ciccone, envolviendo a Boudou, pero lo que no ha quedado claro, incluso ni la justicia lo tiene, es la situación real del vicepresidente en el caso, simplemente, porque se han presentado innumerables “pruebas”, que no son tan transparentes y legítimas, y desde ya, ningún juez que tenga el sentido de la profesionalidad incorporada, puede tomar alguna resolución sobre todo esto.
Fueron o son, meramente, algunas chances de provocación, que la justicia no puede aceptar como denuncia, pero ciertamente debe poner al servicio de una causa, todo el andamiaje para descubrir alguna intención desmedida, si en realidad existió.
Para que nuestros lectores puedan sacar conclusiones más equitativas o valederas, voy a reproducir los siguientes párrafos de notas que se emitieron oportunamente.
Para confundir a toda la sociedad en este asunto, los mercaderes del grupo Clarín, a través de sus medios más vistos (Canal 13, TN, etc.) difundió lo siguiente, algo que pueden corroborar por Internet en Google:
Debió intervenirla con un decreto de necesidad y urgencia. Es por el escándalo judicial que involucra al vicepresidente y por los problemas en la fabricación de billetes. El plan es expropiarla.
Debut. Hernán Lorenzino, ministro de Economía y flamante interventor de la ex Ciccone, visitó ayer a la tarde la planta de Don Torcuato que dirigía Alejandro Vandenbroele. /Escrito por Mario Quinteros
El nexo fue Vandenbroele
La decisión no modifica la investigación contra el vice
Cristina eludió el tema y se enredó con la xenofobia
Dura reacción de la oposición
Con la idea de ocultar la pista de los dueños
El Gobierno salió al rescate de la ex Ciccone Calcográfica, una empresa con dueños desconocidos, pérdidas millonarias y que está además siendo investigada en la Justicia por lavado de dinero, en el marco de una causa en la que el vicepresidente, Amado Boudou, está imputado por enriquecimiento ilícito y negociaciones incompatibles con la función pública.
El Ministerio de Economía informó ayer que la presidenta Cristina Kirchner decidió la intervención de la ex Ciccone mediante el Decreto de Necesidad y Urgencia 1338/12. El Poder Ejecutivo mandó al Congreso un proyecto de ley para declarar a la imprenta de “utilidad pública y sujeto a expropiación”, informó el Gobierno en un comunicado.
Los interventores de la compañía serán el ministro de Economía, Hernán Lorenzino, y la titular de la Casa de Moneda, Katya Daura, una funcionaria de confianza de Boudou.
Clarín anticipado a fines de julio que la Casa Rosada pensaba estatizar la ex Ciccone. Legisladores de la oposición, como Fernando “Pino” Solanas, ya habían presentados proyectos de ley similares al que ahora impulsa la Casa Rosada.
Según pudo saber este diario, el director de la empresa, Alejandro Vandenbroele, hizo de nexo entre la compañía y el Gobierno para poner en marcha el nuevo plan
La ex Ciccone tiene un costo operativo de un millón de dólares al mes. Sus accionistas son desconocidos para la sociedad. La firma es controlada por una sociedad anónima llamada The Old Fund. Vandenbroele fue quien armó la ingeniería societaria de la empresa. En su año como director demostró que su vínculo con el Gobierno es profundo: consiguió que la AFIP le otorgue una moratoria excepcional, imprimió las boletas electorales del Frente para la Victoria y se alzó con un contrato estatal para fabricar 410 millones de billetes de cien pesos.
Boudou dice que no conoce a Vandenbroele, pero éste pagó expensas, el cable y el teléfono de un departamento que el vice tiene en Puerto Madero. La Justicia comprobó además que el socio de Boudou, el millonario José María Núñez Carmona, y también el hermano del vice, Juan Bautista, viajaron por el mundo con pasajes y gastos pagos por The Old Fund.
El proyecto de ley que el Gobierno envió al Congreso establece que “el precio de los bienes sujetos a expropiación” de la ex Ciccone se determinarán mediante un análisis del “Tribunal de Tasación de la Nación”. Eso significa que el Gobierno no descarta pagarle a The Old Fund una indemnización por la expropiación de su empresa.
Según el proyecto, “la suma que eventualmente deba abonarse será pagada -hasta el monto correspondiente si excediera el de la tasación- con la deuda que Compañía de Valores Sudamericana (CVS, la ex Ciccone) se registre ante la Administración Federal de Ingresos Públicos (AFIP)”.
La ex Ciccone le debía 62 millones de pesos a la AFIP, de los cuales habría pagado 7 millones. A eso se suman otras deudas que la compañía tiene, por ejemplo, con el fisco bonaerense: le debe al menos 35 millones de pesos a ARBA. El proyecto de ley K no dice que esa variable será tenida en cuenta para tasar los bienes de la imprenta.
Estipula, eso sí, que la empresa sea auditada por la SIGEN, que controla Daniel Reposo, otro amigo de Boudou.
El proyecto oficial pide que “el personal” de la ex Ciccone pase al Estado “conservando todos los derechos laborales adquiridos, la afiliación gremial que posea y la vigencia de su Convenio Colectivo de Trabajo”.
El texto que la Casa Rosada envió al Congreso dice que “el Estado debe concentrar la actividad de fabricación de dinero circulante”.
Boudou como ministro de Economía, y Daura como titular de la Casa de Moneda, habían sido quieren frenaron un plan de modernización de este último organismo que hasta incluía la estatización de la ex Ciccone. El nuevo proyecto para esa compañía será tratado el jueves por el plenario de comisiones del Senado. Paradojas del oficialismo: el titular de la Cámara alta es Boudou.
Además, con el objetivo que tenemos desde NUEVO PAÍS, de clarificar los “tantos”, puntualizaremos los dichos del propietario de la Empresa Boldt, que para nosotros, son el eje principal de toda la cuestión que aludimos. El texto más relevante, de las apreciaciones de dicho empresario, fue el siguiente:
Palabras de Antonio Ángel Tabanelli, (dueño de Boldt)
“Podría haber sido una empresa mixta también. Ciccone es una compañía tecnológicamente mejor dotada que Casa de Moneda. Asociarse a una empresa extranjera que tenga tecnología y utilizar esas máquinas que no se utilizaban y que no se iban a utilizar nunca más e iban a la quiebra”.
“En momentos donde la causa por la ex Ciccone no está en el centro de la escena, el dueño de Boldt, la empresa a la que acusó Amado Boudou al estallar el escándalo de la calcográfica, rompió el silencio y aseguró: “Nunca tuvimos ambición de hacer billetes con Ciccone”.
Bien, con todo este material difundido por el Grupo Clarín, que indudablemente tiene demasiado interés en el tema, ya que lo lanzó a la circulación pública en primera instancia y durante varios meses, incluso, dos meses antes de las elecciones que Cristina ganara con el 54% de los votos, con un casi 40% de diferencia con el resto, está a la vista que el grupo quería destruir la unión entre la presidenta y el vice elegido por ella, para confundir o manipular a la comunidad argentina en su conjunto.
Fíjense que en todas las apreciaciones que han vertido sus periodistas, siempre vinculan a Boudou en todos los sentidos, con el resto de los funcionarios del gobierno nombrados. Caso Reposo, Katya Daura, Vandenbroele, etc., pero en ningún momento incluyen a Boldt, ya que estos han sido los más interesados en imprimir billetes, como también las boletas de las elecciones santafesinas a cargo del entonces gobernador Hermes Binner.
Por un lado manifiestan que Ciccone, imprimió las boletas electivas del Frente para la Victoria, pero no declaran a Boldt como imprentero de Binner. ¡Por algo será! ¿No les parece? De cualquier manera no tiene nada que ver en el tema la impresión de boletas, aquí estamos hablando concretamente de la impresión de billetes, que en definitiva, es lo que le interesa a la justicia, de acuerdo a las denuncias que efectuó el Grupo mediático. O mejor dicho, la involucración de Boudou, por presunto lavado de dinero.
Las palabras que esparce el titular de Boldt, no son claras ni convincentes, porque aduce “Nunca tuvimos ambición de hacer billetes con Ciccone”. Pero tengo informes que alguna vez me proporcionó un allegado al titular de ésa firma, que tenían gran interés de comprar las acciones de la firma Ciccone, para poder imprimir billetes en el país, sin oposición alguna. Al menos me le dijo un tal Rafael Tendini o Tenditti, no recuerdo bien, que concurría a almorzar a una parrilla de la calle Tucumán al 900 y que se presentaba como pariente cercano al señor Tabanelli.
Claro, todo esto necesita de pruebas y vaya a saber si este personaje se encuentra a mano para declarar si alguna vez se lo requiere.
En otro orden, es notorio que la debilidad del grupo Clarín, en estos tiempos, lo lleva a utilizar todo tipo de artimañas, para atenuar en lo posible al gobierno, con falsas acusaciones, total el tema es mentir, y hasta que se aclare algún día se va ganando espacio.
No es casual, algo que alguna vez lo manifesté por este mismo espacio, que Clarín o mejor dicho Magnetto, se especialice en atacar a las “patas” más cercanas a la presidenta, con el objetivo de aminorar su gobierno, y poder de esta forma, manipular a toda una sociedad, que desea fervientemente, que se ponga en vigencia total la Ley de Medios, que está votada y afirmada desde el Parlamento argentino desde hace 3 largos años y no se puede ejecutar, por una simple actitud caprichosa y maliciosa de una porción de delincuentes que nos quieren seguir manejando como rebaño.
Es la hora crucial para que los argentinos despertemos y nos pongamos los pantalones largos, como decían nuestros abuelos, porque no se puede seguir cayendo en la trampa que nos proponen los sectores dominantes.

El fin de semana, seguiremos con la segunda parte de esta nota que podrá aclarar la situación para cada uno de los lectores.