AEROLÍNEAS ARGENTINAS: EL ORGULLO DE NUESTRA NACIÓN 

No voy a profundizar sobre la historia de Aerolíneas, con relación a los números, estadísticas, transacciones comerciales, ni siquiera algo parecido a los gastos que produjeron cada gobierno, a través de las políticas empleadas, o las empresas que aprovecharon la “liquidación” ofrecida por  Menem, para destruir a la misma. Mientras estoy escribiendo la editorial de hoy, el Aeroparque y Ezeiza se hayan de paro, por la suspensión de unos 10 vuelos de empresas que si bien no están ligadas a Aerolíneas Argentinas, existen una cantidad de convenios, pero que bajo ningún aspecto, merecen la desidia de algunos que solamente buscan profundizar una crisis, que no existe, simplemente, hay maniobras de carácter políticos-empresariales, que tienen como objetivo, hacer tambalear a la empresa ahora estatal.
Trataré de explicar lo que ha significado y significa en nuestros días, esta empresa que fue creada por Juan Domingo Perón, allá por el año 1950. Que fuera privatizada por Carlos Menem, con sus recetas neoliberales, al precio de un par de medias y que luego, esa misma empresa (Iberia) que adquirió los derechos, la sirviera en bandeja al grupo Marsans, hoy cuestionados por la justicia española, por graves delitos económicos.
Desde el 2009, Aerolíneas volvió a flamear con los colores del país, gracias a la actitud y convicción de Cristina Kirchner, logrando la recuperación de varios vuelos, además de sanear aquellas fabulosas deudas que dejaron los grupos nombrados anteriormente, con la inclusión de 57 aviones de última generación, que además de estar a la altura de las circunstancias, la ubican hoy, entre las 10 mejores del mundo.
En otro orden, y haciendo un cotejo con la famosa situación de un cepo cambiario, como desean argumentar aquellos que están en contra de las políticas públicas que impulsa el ejecutivo, Aerolíneas lanza a partir de diciembre, un plan de aumento de los vuelos, que en algunos puntos alcanzan a más del 100%, con destinos como Miami y Punta del Este, contradiciendo netamente las versiones que no se puede salir del país por ese tema del cepo al dólar. Las cuantiosas reservas para el verano próximo, hace que la dirección general de Aerolíneas, haya dispuesto esta medida, para favorecer a los turistas argentinos, que desean salir del país en sus vacaciones.
Pero bien, no encuadra con lo que uno desea explicar a la sociedad, simplemente, quiero ser breve y dejar en claro, lo importante y fundamental, que significó la recuperación de una línea aérea que fue orgullo para el país, creada, casualmente por un hombre que empleó las mismas recetas inclusivas, que en estos tiempos ha utilizado y sigue en la profundización de ésa idea, el matrimonio que gobernó los destinos de la Argentina desde mayo de 2003.
Para los que piensan que Aerolíneas ocasiona pérdidas al Estado y en alguna oportunidad, se perdía un millón de dólares diarios, hay que explicarle con detenimiento, porque parece que no entienden o no desean hacerlo, que es primordial que un país tenga su bandera en una empresa aérea, aplicando un sentido nacional en la misma, difundiendo desde ése punto, tal vez lo más importante, estar al servicio de la comunidad mundial, desde las mismas entrañas políticas que impulsa un país, porque si se hace bien, prestigia a toda una nación.
Aerolíneas hoy, representa uno de los logros más preciados que ha impulsado nuestro gobierno y deja en claro, que si se hace todo con transparencia, vocación y convicción, no hay que temerle al agrandamiento del estado.
La mejor manera de repartir los recursos de una Nación, en todo lo que significa la inclusión social, es a través de la administración y conducción de lo estatal, con sentido político para el bienestar de toda una sociedad, sin distinciones de ninguna índole.