Vea y compare, lo que escribí hace un año y lo que sucede hoy. ¿Nota alguna diferencia o mentira de mi parte?

Voy a repetir la editorial del 1 de Mayo del año anterior, porque tiene extraordinaria vigencia, además para que vuelva a escuchar el gran tema del amigo y compañero Ignacio Copani. Aquí va la nota completa, publicada en mi página el pasado 1 de mayo del 2017:

Nunca tan vigente las letras de Ignacio Copani en éste 1 de mayo

Lunes, 01 de Mayo de 2017

Háganse cargo de lo que borraron y las brutalidades que ejecutan

¡Que día del trabajador distinto! Nada se pudo festejar, sólo reclamos, instisfechas peticiones con un sindicalismo tibio, salvo algunas excepciones, Yasky-Michelli y algunos sectores del peronismo combativo o partidos de izquierda, incluso teniendo que soportar el acto del miniestadio de Ferro, donde la derecha recalcitrante a sabiendas que no pueden convocar a sectores populares, realizaron su acto en un pequeño recinto y a puertas cerradas, porque precisamente, las reacciones populares hubiesen ocasionado algunos inconvenientes que éste gobierno de ricos no están dispuestos a soportar. ¡Que paradójico!

Tienen asegurado el premio al concurso de mentirosos

Cuesta creer a esta altura de las circunstancias y luego de 29 meses de gobierno macrista, que gran parte de nuestra población siga creyendo en la palabra de varios miembros del gobierno nacional, principalmente, en la figura de su presidente, Mauricio Macri y algunos de sus ministros claves (léase Peña, Frigerio, Garavano, Aguad o Bullrich).

No puede existir semejante atropello contra el pueblo

Créame que uno intenta hacer un análisis fundamentado con racionalidad, como para entender lo que el gobierno macrista está ejecutando y, no encuentra nada positivo que nos lleve a un plano de coherencia, pues dejan un manto de dudas, en cuanto al interés real que practican o accionan para gobernar a su pueblo.

"Es una cuestión de actitud", como diría el gran Fito Paéz

Para comprender el título y subtítulo de la presente editorial, solo basta reconocer los actuales acontecimientos reales de nuestro continente, sobre todo en estas últimas semanas, pues observamos el inminente peligro de las democracias, puestas al servicio de los sectores oligárquicos y en franco desprestigio, estimulados desde ya por los medios de comunicación afines a la derecha internacional, que al ver sus objetivos truncos con obstáculos de concreción, están decididos a todo y, hablando en castellano, como se dice vulgarmente en el café, significa que si no logran tales objetivos, jugarán sus cartas a modelos autoritarios, con todo lo que representa para los habitantes de nuestro continente estas cosas, teniendo en cuenta las desapariciones físicas, detenciones, torturas y muertes que han producido los gobiernos autoritarios en las décadas no tan lejanas.

Latinoamérica ha entrado en un cerrojo difícil de esquivar

Hace algunos meses les decía en una de mis editoriales, que tuve que frenar un libro titulado "Rumbo a la Patria Grande" porque los rumbos de tales objetivos se habían desviado y no tenía sentido entregarles una obra que iba a contramano de la realidad que vivenciábamos en esos momentos y más aún, con lo que está pasando en nuestros días.

Me duele sobremanera la actitud de millones de latinos que no han comprendido todavía, cuáles son los objetivos de la derecha internacional para lograr la sumisión de los pueblos a vuestros antojos.
Gran parte del continente ha quedado sumergido a tales decisiones de los sectores corporativos, fuertemente apoyados por los medios de comunicación y hoy, más que nunca en la historia de América, con una justicia sumisa a tales poderes. Ya no se necesita imperiosamente directivas o complicidades concretas de aniquilamiento de parte de los sectores castrenses, aunque nuevamente, por las dudas, han puesto a disposición de los gobiernos neoliberales, la militarización en algunas regiones, incluso en el litoral y sur de nuestro país, porque ven un resurgimiento de los sectores populares o de líderes de tales movimientos que pueden volver al poder con el voto popular, simplemente producto de sus errores y de los avasallamientos contra los más vulnerables.
No voy a ser extenso en mis apreciaciones, ustedes ya saben lo que está sucuediendo en Argentina y en gran parte de Sudamérica, por lo tanto, sería una repetición de todo lo que puede visualizarse en estos meses recientes y en estos días. La situación de Brasil con la probable e inmediata cárcel para uno de los representantes más fieles de las causas populares, como Ignacio Lula da Silva; la traición a Rafael Correa y a todo el pueblo ecuatoriano de parte de Lenin Moreno y sus socios del norte y lo que acontece en estos momentos en nuestro país, con un presidente y entorno, totalmente entregado al poder económico, con una ingerencia en la justicia como nunca se vio en el país, es una prueba más que elocuente de todo lo que estoy comentando en la presente editorial.
La derecha más recalcitrante del continente va por todo y usted está en grave peligro si no hace nada para evitarlo, porque todos, absolutamente todos, seremos responsables de los destinos inmediatos negativos que se aproximan, si nos quedamos de brazos cruzados.
Los anhelos de la Patria Grande se van desvaneciendo día a día, si no luchamos como corresponde para que esto no ocurra en un futuro mediato, por lo tanto sugiero abierta y desesperadamente de nuestra sociedad que caminemos por esta vida, con los ojos, mentes y oídos bien abiertos, porque se avecinan tiempos difíciles y no significa que estoy pintando un panorama apocalíptico, es una verdad tan visible, que solamente un distraído o malintencionado no puede darse cuenta. Téngalo presente, a unirse y luchemos para cantar...¡ Hasta la victoria siempre!

Algún día llegará la justicia a nuestro país y Macri y su entorno estarán entre rejas por traición a su bandera

Cuando inicié esta serie de capítulos con el objetivo de mostrar a nuestra sociedad, cuáles son las consignas que debe tener cada ciudadano/a para honrar su bandera y la patria, como un compromiso insoslayable que justifique su presencia en un cargo público, máxime si es elegido por su propio pueblo, lo hice con la convicción de que el pueblo en su conjunto, tenga bien en claro que no hace falta entrar en acciones sofisticadas, sino en una plena conciencia de parte de esos personajes elegidos por sus conciudadanos, en la manera patriótica de defender los intereses nacionales por encima de cualquier juramento protocolar que nos muestra la cultura argentina, en querer demostrar que con un sólo juramento, ya queda saldada sus conductas ante el soberano.