|
EVA Y LAS MADRES
Las Madres de Plaza de Mayo participaron de la inauguración del retrato de Evita en el Ministerio de Desarrollo Social de la Nación. El edificio con el emblemático rostro en su ala sur cambiará las postales de la ciudad de Buenos Aires.
Evel de Petrini, Mercedes de Meroño, Ana de Barimboin, Hebe de Mascia y Celia de Prósperi sentadas en primera fila escucharon las palabras de la Presidenta. En el camino hacia el palco, todas recordaron el 26 de julio de 1952 cuando a las 20:25 se anunció el paso a la inmortalidad de Eva María Duarte de Perón. Fue exactamente a esa hora cuando comenzó el acto con un video que recorrió los momentos más trascendentes de la vida política de Eva: el voto femenino, las masivas movilizaciones de apoyo al gobierno de Perón, el afecto del pueblo.
Eva había nacido el 7 de mayo de 1919. Era de la misma generación que las Madres de Plaza de Mayo. Quizás un misterio de la historia signó a esas mujeres que fueron tan aguerridas y tan fundamentales para la historia del país.
En su discurso, la Presidenta Cristina Fernández de Kirchner recordó que: “El 8 de marzo del Año del Bicentenario declaramos a Evita, a Eva Duarte de Perón la Mujer del Bicentenario y presentamos, en el Salón de las Mujeres Argentinas, en la Casa Rosada, la maqueta de lo que hoy estamos viendo aquí hecho y construido con inmenso amor, con inmenso respeto a la historia y a la cultura. Porque no es solamente una representación política, Eva Perón es una auténtico ícono histórico y cultural de todos los argentinos.”
Y agregó: “Y quisimos hacerlo, aquí, en su lugar; yo me acuerdo que había estado en Cuba, en enero de 2009, y en el homenaje en la Plaza de la Revolución, a José Martí vi la imagen del Che, representado en el ministerio en que él trabajaba, y allí me vino a la cabeza cómo es posible que una sociedad homenajee a un hombre que no es de su país y nosotros no tengamos un homenaje a una mujer que significó no solamente el ingreso de las mujeres a la política argentina, no solamente la revolución social más importante de nuestro país, sino también que asumió sin cortapisas, sin dobleces la representación del pueblo y de la Patria, tal vez, con más pasión y amor que nadie”.
Los encargados de llevar adelante la obra fueron los artistas Daniel Santoro y Lelio Mármora. Y detalló cómo fueron elegidas las imágenes representadas. Para el ala sur buscó entre los papeles de su abuelo, la primera imagen que había visto de Eva, “fue la Evita que conocieron millones de trabajadores cuando creó los derechos más importantes para los niños, para los trabajadores, para los ancianos, fue la Evita hada, fue la Evita dadora de dones y generosa”.
Y concluyó: “Esa mujer, como muchos le decían, y que hoy, desde el fondo de la historia, nos enseña que nada se obtiene sin sacrificio, que enfrentarse, como decían recién las imágenes que veíamos, a los poderosos, tiene un precio, que defender a los humildes y a los que menos tienen, cuesta caro. Y ella, pagó con su vida gustosa el precio de ser recordada para siempre como la abanderada de los humildes, como una humilde mujer del pueblo, Evita, como se recuerda a las grandes”.
Si un gobierno deja su impronta en los símbolos que elige, el rostro de Eva enclavado en la Avenida 9 de julio inaugurado con una marcha de antorchas y la luz de los pañuelos blancos hablan por sí mismos.
|
