Generando cambio

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“IV Escuela Regional MOST-UNESCO 2011. América Latina y el Caribe” PDF Imprimir Correo
Escrito por Américo Vialtres   
Domingo, 18 de Septiembre de 2011 06:19
HEBE PARTICIÓ DEL CIERRE DE LA “IV ESCUELA REGIONAL MOST- UNESCO”
La presidenta de la Asociación Madres de Plaza de Mayo, Hebe de Bonafini, cerró hoy, junto al sociólogo y politólogo brasilero Emir Sader, la “IV Escuela Regional MOST-UNESCO 2011. América Latina y el Caribe” en el Espacio Cultural Nuestros Hijos (ECuNHi).
La conferencia significó el cierre de una semana intensa de actividades de la Escuela Regional, cuyos ejes fueron “Juventud, participación y organización para el desarrollo social”, impulsadas por el Programa Gestión de las Transformaciones Sociales (MOST), de la Unesco; el Ministerio de Desarrollo Social; el Centro Latinoamericano de Economía Humana (CLAEH) y el Consejo Latinoamericano de Ciencias Sociales (CLACSO). La Escuela Regional MOST-UNESCO es un espacio de reflexión y profundización teórica, metodológica y práctica sobre el nexo entre la investigación en Ciencias Sociales y las Políticas Públicas. Este año, la Argentina fue sido elegida sede para la realización de este evento latinoamericano que, en su IV edición, propuso como eje central las experiencias regionales de elaboración, implementación y evaluación de políticas públicas de inclusión y desarrollo social, especialmente las referidas a la juventud.
En ese marco, cientos de jóvenes investigadores, estudiantes avanzados de maestría y doctorado y responsables de políticas públicas para la juventud, de distintos países de América Latina, participaron con el objetivo de promover debates y acciones hacia la elaboración y consolidación de políticas transformadoras.
En la conferencia de cierre, Emir Sader, secretario ejecutivo de CLACSO, señaló la emoción que le generaba estar en el ECuNHi: “Somos muy agradecidos, los brasileños, en nombre de Hebe, a los que han permitido la lucha, el rescate de este espacio”, sostuvo.
De cara al público, señaló: “Acá tenemos una fórmula insuperable: juventud, conocimiento y lucha emancipatoria. Si logramos combinar los tres elementos, ganamos. El conocimiento sólo tiene sentido si nos permite superar la alienación, no tanto la nuestra –tenemos conocimiento– pero la mayoría aplastante de la humanidad no sabe lo que hace. Marx lo dice en la apertura de El Capital: ‘lo hacen pero no lo saben’. Una frase tan chica que dice tanto. La gente que produce la riqueza del mundo no sabe lo que está haciendo, no sabe qué relación tiene con el mundo que producen y que los aplasta”.
Luego, agregó: “Nuestra tarea fundamental es ayudar, modestamente, a que el pueblo tenga conciencia de su lugar, de lo que hace, de lo que podría hacer, de lo que terminará haciendo”.
Posteriormente, en un castellano claro y parafraseó al Che, reclamó que la universidad se pinte de negro, de indio, de mulato, de indígena, de todos los colores de nuestra sociedades. “Que el conocimiento supere los muros de la universidad y llegue a la gente de la sociedad. Tenemos que ser instrumento de la transformación de la realidad”.
“Esto sigue con el trabajo que ustedes van a hacer afuera, sea a nivel de trabajo popular o de transformación de esos conocimientos en políticas públicas. Nada mejor para superar el neoliberalismo que fortalecer las políticas públicas. El neoliberalismo plantea que todo sea mercancía, que todo tenga precio, que todo se compre y se vende, una especie de shopping. La esfera pública es la esfera de los derechos. Queremos sacar las cosas de la esfera mercantil y ponerla en la esfera pública. El neoliberalismo es una máquina odiosa de expropiar derechos. Democratizar es desmercantilizar. Esas cosas no tienen precio, no debieran, debieran  ser inherentes a los seres humanos”, indicó.
En ese marco, destacó a Cuba como la “sociedad cubana más igualitaria del mundo, una sociedad desmercantilizada donde la gente tiene derecho a la salud, a la educación, a la habitación, por  naturaleza, no está filtrado por el precio del dinero, por eso es una sociedad igualitaria, con ellos mismo y con el resto”.
Por último, expresó: “Lo que mejor hace América Latina no es futbol ni telenovelas: es cultura. Los jóvenes tienen que ser elementos fundamentales para erradicar el analfabetismo. Este continente es formidable: tuvimos avances extraordinarios y derrotas tremendas. Tenemos el único continente que tiene un proceso de integración regional relativamente autónomo respecto a Estados Unidos. Nos da mucho orgullo. Ustedes son portadores de un conocimiento mayor al que tenían el lunes y menor de lo que van a tener mañana cuando lleven los conocimientos a la práctica, a la formulación de políticas”.
A su turno, la presidenta de la Asociación, Hebe de Bonafini, afirmó: “La palabra conocimiento me puede porque para contar, las Madres, cómo logramos lo que hemos logrado hay que hablar del conocimiento. En realidad no conocíamos nada y muchas de nosotras, la mayoría, que venimos de la clase muy baja, sabíamos leer pero no sabíamos escribir. Y eso a cada una de nosotras nos daba mucha soledad, no la soledad de la falta de los hijos, de la destrucción de la familia: la soledad de la ignorancia. Algunas habíamos tenido la suerte de escuchar a nuestros hijos, que siempre nos decían, ‘mamá, dejá de fregar los platos y leé política’. Yo decía ‘¿para qué?, ya están ustedes’. Y tenían razón”.
Posteriormente, destacó al amor como cualidad fundamental de la historia de las Madres y de cualquier lucha política: “La salida de las Madres a la calle fue por algo, yo no he leído a Marx pero me parece que sobre eso no escribió mucho, que es el amor. El amor inmenso a nuestros hijos, el amor a lo que ellos hacían y tratamos, en lo posible, de levantar sus mismas banderas y tomar conciencia que ellos no estaban pero nos habían parido a esta lucha, que nos habían dejado un legado. No podíamos dejar que la sangre de ellos fuera inútil”. “La política sin amor no sirve, uno tiene que amar apasionadamente, fanáticamente, lo que hace, que es el amor al otro, nosotros a nuestros hijos y por nuestros hijos a los demás, por ese pensamiento que ‘el otro soy yo’, lo que le pasa al otro también me pasa a mí”, agregó.
En medio de aplausos y reconocimiento, la Presidenta de la Asociación le habló particularmente a los jóvenes que la escuchaban con atención: “Las Madres seguimos amando a nuestros hijos en ustedes, nuestros hijos nacieron en otros jóvenes. Y tenemos la suerte de haber podido plasmar, con este gobierno de Néstor y Cristina, lo que las Madres tanto queríamos, que no es solamente la Verdad, sino la Justicia, que caiga implacable sobre los responsables. ¿Cómo se hace justicia? Primero la hace el pueblo, saliendo a la calle como salimos las Madres, presas, golpeadas, nunca dejamos, nunca vamos a dejar”.
“Tenemos que tener conciencia que con Néstor y Cristina tuvimos todas las posibilidades de juzgar, y ahora de la igualdad, que es una palabra de la que se habla mucho pero cuesta ponerla en práctica”.
En relación al espacio donde tenía lugar la actividad, Hebe destacó cómo la vida pudo vencer a la muerte: “Haberle pedido a Néstor (Kirchner) este lugar, el Liceo Naval Militar, donde se enseñó a matar y a torturar para decirle, y desafiantemente, que le íbamos a poner vida donde hubo muerte no es poca cosa. Y para hacerlo hay que ponerle amor, sólo con palabras no va. Esas son batallas que los pueblos vamos ganando”.
“Tenemos un gobierno de militantes, un hombre y una mujer que fueron militantes junto a nuestros hijos. Por eso es un orgullo enorme que un hijo nuestro haya cruzado la Plaza de Mayo y haya ocupado la Casa de Gobierno, como Néstor Kirchner. No es poca cosa y no se da en muchos países”, expresó en otro tramo de su alocución.
Sobre el final, sostuvo: “Las Madres sentimos que los jóvenes tienen una gran responsabilidad y que la gran asumido con muchas ganas. Están trabajando, estudiando, transmitiendo el conocimiento”.
Por su parte, en relación a las nuevas tecnologías, señaló: “No es lo mismo hablar con el twitter que abrazar a una persona: nada que ver. Abracémonos mucho, preguntémosle al otro qué le pasa, cómo te sentís y qué querés hacer”.
“Tengo muchas ganas de hacer cosas, las Madres estamos convencidas de los que estamos haciendo. Nuestros hijos y su sangre están reivindicados porque hay juicios y sobre todo porque hay millones de jóvenes que tomaron sus banderas. La sangre para los pueblos nunca es inútil”, concluyó
 
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