DISCURSO

Si es que caen los principios a la hoguera
huelgan las palabras,
serán dichos devenidos bichos,
vacuos abracadabras
en el texto del contexto del discurso
que seguirá su curso
por la senda de las cabras. Cada verbo suelto acabará mero chamizo
y así las inflexiones,
saltará de la oratoria la bacteria sin memoria
que ha variado sus razones
en abstracto.
¡Vaya con el acto!
Hay cabrones que imponen condiciones,
y se pega en la refriega,
Qué principios ni principios
cuando vienen de a malones…
Capitulación y entrega,
A firmar sin chistar lo estipulado
y un nuevo y cálido discurso
como recurso
para quedar –ya es costumbre-, bien parado.
A toda oposición le cabe
subir de polizón en cada nave
y salvarse si arrojado, aunque sea a nado,
si no puede hacerse de la llave.