El secretario de Derechos Humanos de la Nación, Martín Fresneda, y la procuradora general de la Nación, Alejandra Gils Carbó, inauguraron en el Palacio San Martín, el Coloquio Regional A 40 años del Plan Cóndor. Debatieron sobre los procesos de justicia y lucha contra la impunidad en la región. Al abrir el encuentro, Martín Fresneda expresó ayer que “es un orgullo decir en estos tiempos que han pasado 40 años y podemos tener logros; hace 10 años no podíamos hablar de ese orgullo”.
Dirigiéndose a los participantes de Latinoamérica, el secretario aseguró que forman parte de “una lucha que resulta desigual frente a los intereses de los poderosos, frente a un mundo que se sigue manejando con intereses financieros y que en otros tiempos utilizaron doctrinas de seguridad nacional. De eso venimos a hablar: cómo nuestros países lograron desandar ese camino de las doctrinas de seguridad nacional después de las tragedias que vivimos con las dictaduras militares y ese plan perverso que fue el Plan Cóndor”.
“A 40 años del Plan Cóndor, sin duda el protagonismo lo tienen los Estados en un proceso de acuerdos estratégicos regionales, en el que la erradicación de la impunidad es fundamental para que nuestros países vuelvan a tener la oportunidad de ser una patria grande”, sostuvo.
Y agregó: “Nosotros estamos convencidos de que terminar con la impunidad nos garantiza hacia el futuro la posibilidad de tener una Argentina más justa, porque el terror no fue porque tuvimos dictadores malos que les gustaba exterminar. Todos sabemos muy bien que hubo intereses gestados para erradicar cualquier tipo de lucha ligada a la lucha por la igualdad, por la distribución de la riqueza”.
En tanto, Gils Carbó resaltó que “el proceso de justicia por crímenes de lesa humanidad argentino es un modelo reconocido a nivel mundial, porque casi a 40 años después del golpe cívico-militar, los responsables están siendo juzgados por tribunales ordinarios; porque en esos juicios aplican las leyes vigentes al momento que se cometieron los hechos, y por la profundidad de las investigaciones, que no solo abarcan a los responsables directos, sino a los responsables civiles, políticos, eclesiásticos, judiciales y empresarios, que fueron quienes dieron las órdenes, garantizaron impunidad y se beneficiaron económicamente”.
“Una de esas magacausas es la que investiga los crímenes cometidos en el marco del Plan Cóndor, que abarca 174 víctimas de Argentina, Bolivia, Brasil, Paraguay, Chile, Uruguay y Perú”, explicó la Procuradora general.
“Los fiscales –continuó- demostraron que fue una asociación ilícita trasnacional dedicada a la persecución de militantes sociales y opositores políticos; demostraron que en 1975 las dictaduras de la región se reunieron y crearon el Plan Cóndor, que implicaba una compleja estructura clandestina”.
Luego de repasar los logros de la política de Memoria, Verdad y Justicia, Gils Carbó aseguró que “así como hace 40 años las autoridades de los países del cono sur se reunían para crear lo que se llamó Operación Cóndor, hoy las democracias de esos mismos países se reúnen para concertar políticas de promoción de los derechos humanos, para colaborar en el esclarecimiento de esos crímenes cometidos por dictaduras sangrientas”. “Este coloquio es una prueba de los avances de este proceso”, expresó.
Finalmente, la Procuradora indicó: “Cuando asumí hace tres años como Procuradora General asumí el rol de garante de la continuidad de ese proceso de juzgamiento. No va a haber ni un solo paso atrás porque estamos convencidos de que estamos cumpliendo un mandato colectivo, y porque de esa manera fortalecemos la madurez de las instituciones y la consolidación de nuestras democracias”.