El stock ganadero debe aumentarse para satisfacer la demanda interna y externa:

Lo dijo el Jefe de Gabinete, Jorge Capitanich, quién reconocidó que "hay una disputa rspecto de los saldos exportables".
El Jefe de Gabinete, Jorge Capitanich, afirmó que es necesario incrementar el volumen de producción de carne bovina, al tiempo que sostuvo que hay un monitoreo permanente para cumplir las estrategias de abastecimiento y exportación del producto. En la habitual conferencia de prensa matutina, en la Casa de Gobierno,  también puso de relieve  que el sector cuenta con el “mejor precio de hacienda”.
En cuanto a lácteos dijo que se observa que ha incrementado su volumen de exportación en los últimos siete meses.
Sobre el ganado dijo que es necesario incrementar la producción de kilos, dijo que el stock tiende a tener niveles de plazos más extensos, dijo que también es necesario aumentar la estructura de forraje, dar incentivos a la cadena de valor pero, fundamentalmente, aumentar kilos para satisfacer la demanda creciente. De la producción, precisó, el 93% va a consumo interno y el 7% a exportación.
En el mercado ganadero operan las siguientes restricciones, dijo y precisó: hay 11 millones de hectáreas menos de superficie ganadera por sustitución de cultivos agrícolas, ejemplo soja, que han provocado un desplazamiento a otras zonas: Chaco, Formosa, en detrimento de la pampa húmeda, lo cual tiene  una incidencia en el costo de transporte de la hacienda  para procesar la carne en el frigorífico.
Otra restricción es el coeficiente de productividad. Por ejemplo en Estados Unidos el destete es  del 92% y aquí del 62%
Por ello, dijo Capitanich,  es indispensable el incremento de la producción por kilo de hacienda y recordó que en el período 2003-2007 se incrementaron 58 millones de cabezas de ganado vacuno. Recordó que en gobiernos neoliberales la producción ganadera bajó.
Sostuvo que hay “una disputa respecto de los saldos exportables”, de ganado y subrayó que el stock ganadero “no tiene correlación directa con los derechos de exportación ni con las políticas supuestamente intervencionistas del Estado”, dijo.
Respecto de la industria lechera el Jefe de gabinete explicó que la situación del clima ha afectado el primer semestre del año, dado que las altas temperaturas  produjeron una reducción productiva. También las lluvias con anegamientos afectaron. Dijo que la Argentina, de 1,8 millones de vacas lecheras, debería pasar a 2,5 millones.
Además, agregó, debe expandirse la cuenca lechera, no solo en zonas centrales, para reducir el costo del flete. Se han establecido –agregó- mecanismos con líneas de financiamiento crediticia para reducir costos de acceso a capital de trabajo.
Explicó que tanto en carne vacuna como en lácteos  hay que compatibilizar la demanda externa con el abastecimiento de la mesa de los argentinos.
“Lo que no vamos a hacer –advirtió- es permitir que los vivos de siempre se apropien del excedente de la cadena de valor".