El macrismo resiste la reforma que busca gravar a los sectores más ricos. Sólo el 7% de los propietarios de campos pagaran un impuesto rural del 75%. Este jueves 26 iniciará en la Cámara de Senadores de la provincia de Buenos Aires el debate por el paquete legislativo que impulsa una reforma tributaria, en el marco del comienzo de la gestión del Gobernador Axel Kicillof. El viernes pasado la legislatura ya había aprobado el proyecto legislativo que declaraba la emergencia social, económica, productiva y energética con algunos cambios. De esta manera, la gobernación tendrá facultades para reasignar partidas, renegociar con tenedores de bonos, rescindir contratos en el sector público y congelar tarifas (por 180 días)
La reforma impositiva buscará reorientar la carga fiscal hacia sectores altos, luego de cuatro años de impacto negativo sobre sectores populares.  "El proyecto busca dotar de mayor progresividad a la estructura tributaria para evitar que el esfuerzo recaiga sobre los sectores más vulnerables, que son los principales afectados por la actual crisis que atraviesan el país y la provincia", señalaron desde el gobierno provincial al portal Página 12.
En este mismo sentido, desde la gobernación enfatizaron: “La provincia de Buenos Aires se encuentra atravesando una situación de emergencia. Para atender las urgencias y prioridades definidas es necesario mantener el nivel de ingresos del Estado provincial. Es fundamental hacer más justa la recaudación, cobrando más al que más puede y generando alivio a los pequeños y medianos productores y propietarios”
En este contexto, el impuesto inmobiliario incrementaría entre el 10 al 40 por ciento. En los casos de menor valor fiscal el incremento iría hasta el 15 % mientras que en los casos de mayor valor fiscal la variación iría hasta un 60 por ciento. “La ley provincial establece incrementos en línea y por debajo de lo que estableció la mayoría de los municipios y representa un esquema similar aunque mucho menor en proporción al que implementó el gobierno anterior en 2018, cuando aumentó hasta un 60 por ciento, con una inflación cercana a 27 por ciento en 2017”, explicaron desde la gestión del Frente de Todos.
Asimismo, en algunos sectores aumentarán las alícuotas en valores nunca más grandes que el 1 por ciento y siempre por debajo del máximo predeterminado. En el caso de impuesto sobre embarcaciones deportivas el impuesto será será de 5,5 por ciento y la máxima se ubicaría en 13 por ciento. “Para las embarcaciones deportivas, se ajustan las alícuotas y se modifican los rangos, con el fin de lograr una mayor progresividad. Pagarán más quienes posean embarcaciones de mayor valor”, explicaron.