"La reestructuración de deuda va a ser tema del G-20"

El ministro de Economía, Axel Kicillof, aseguró que la discusión en torno a la reestructuración de deuda "va a ser un tema del G-20 indudablemente" debido a que existe una "preocupación generalizada". En tanto el canciller Timerman afirmó que todos los países están reconociendo "que hay un problema".

En su contacto con la prensa en Brisbane, Australia, -a poco de su llegada para participar de la Cumbre del G-20, junto al canciller Héctor Timerman, en representación de la presidenta Cristina Fernández de Kirchner-, el titular del Palacio de Hacienda afirmó que "donde uno habla de reestructuración de deuda hay un enjambre de buitres que buscan sacar provecho”
Afirmó que la Argentina tiene "una expectativa muy grande respecto a la discusión que se dará en la cumbre del G-20 sobre la necesidad de instrumentar un proceso de reestructuración de deuda".
En declaraciones realizadas en el hotel Pullman, donde se hospeda en Brisbane (Australia), Kicillof expresó que "la cuestión de la deuda no es un invento argentino" y agregó que la Argentina está en una situación "en la que hay países que no pueden pagar su deuda, que están en zona de riesgo".
Asimismo  Kicillof expresó la preocupación respecto de la economía mundial que, dijo, “no está reaccionando a las medidas que se han tomado; probablemente esté reaccionando a la insuficiente de las medidas” Este tema, dijo, es parte del temario, acotó.
“Es importante la discusión que se de en torno de la crisis y por otra parte los remedios” para resolverla, dijo  y mencionó la discusión sobre si de la crisis se sale con medidas tendientes a subir la productividad, la oferta, con medidas estructurales,  o que hay una deficiencia de demanda a escala internacional.  “Estas visiones contrapuestas se expresarán en el debate con los presidentes” en el G 20, acotó Kicillof.
Kicillof dijo que “el G20 es un ámbito muy apropiado para saber que medidas tomar a escala planetaria. Para que mancomunadamente se encuentre una respuesta a esta situación”, dijo.
“Esta crisis –agregó el ministro de Economía- ha tenido una evolución migratoria, empieza en Estados Unidos, después se ubica en los eslabones más pobres de la Unión Europea, pero lo que hoy se está discutiendo no es solo Estados Unidos –que ha mostrado algunas señales de recuperación- ; Europa no se pone en marcha pero el grave peligro ahora es que los países emergentes sufran en este proceso de movimiento de la crisis”.
Dijo que ello puede ocurrir porque “si se retiran las medidas de estímulo en los países centrales puede haber el ‘vuelo hacia la calidad’ que quiere decir que haya una huida masiva de los capitales  que fueron hacia los países emergentes, que genere muchísima inestabilidad desde el punto de vista monetario, cambiario y de los capitales financieros”.
Hay que tener en cuenta además que “si bien China muestra tasas de crecimiento mucho más elevadas que el resto del mundo, este año probablemente tengamos en los últimos 15 años el peor año en el desempeño de China”.
Sintetizó que lo que caracteriza al mundo “es esa situación amesetada  y de desaceleración incluso; a partir de una breve recuperación que ocurrió en 2010, la desaceleración ahora muy notoria”.
Como medidas contracíclicas Kicillof mencionó   que a veces se aplican paquetes de medidas económicas “que nosotros conocemos muy bien: liberar recursos para poder pagar la deuda, se tiende al ajuste fiscal, todo lo contrario a medidas de expansión de la demanda y ese ajuste fiscal después termina teniendo el efecto contrario porque  no solo no se cura el asunto de la deuda  sino que además caen los productos brutos de las economías  y la relación deuda-producto no está mejor que lo que era antes, sino que está peor”.
“El supuesto remedio –dijo-  no solo no cura sino que probablemente enferme”.
En tanto el canciller Timerman afirmó hoy que todos los países de alguna forma están reconociendo "que hay un problema en los procesos de reestructuración de deuda soberana" y que hay "que buscar una solución" a esto.
En un encuentro con la prensa previo a la cumbre del G-20, el funcionario aseguró además que durante el encuentro la Argentina va a impulsar la discusión de la necesidad de trabajo digno, "financiamiento para la concreción de obras de infraestructura y la lucha contra la evasión fiscal a nivel global", entre otros temas.
Conceptos de Capitanich
El Jefe de Gabinete, Jorge Capitanich, en su habitual conferencia de prensa matutina, en la Casa de Gobierno, dijo que la misión que encabezan ambos ministros “tiene que ver con la notificación de la posición argentina en la reestructuración de la deuda soberana”.
Agregó que “el caso argentino es paradigmático y emblemático en el sistema financiero internacional, en virtud de lo que la acción de grupos minúsculos, los fondos buitres, ha significado: pretender fulminar el proceso voluntario de deuda, con la adhesión mayoritaria del 92,4%” de los bonistas.