(Agencia Prensa Armenia).- El Papa Francisco viajó a Azerbaiyán luego de una visita en Georgia entre el 30 de septiembre y el 2 de octubre y pidió por la paz en la región del Cáucaso. Frente a las autoridades de Azerbaiyán y junto al presidente Ilham Aliyev, el Sumo Pontífice dio un discurso el domingo en el que pidió que "Azerbaiyán prosiga por este camino de colaboración entre las distintas culturas y confesiones religiosas". En Azerbaiyán, un país con casi el 95% de musulmanes de mayoría chiita, se estima que hay unos 500 católicos.
"El mundo experimenta lamentablemente el drama de muchos conflictos que se alimentan de la intolerancia, fomentada por ideologías violentas y por la negación práctica de los derechos de los más pobres", agregó Francisco. "Para oponerse eficazmente a estas peligrosas desviaciones, es necesario que crezca la cultura de la paz, la cual se nutre de una incesante disposición al diálogo y de la conciencia de que no existe otra alternativa razonable que la continua y paciente búsqueda de soluciones compartidas, mediante leales y constantes negociaciones".
En ese sentido, y haciendo alusión indirecta al conflicto entre Azerbaiyán, Armenia y Nagorno Karabaj, el Papa declaró: "Así como dentro de los confines de una nación se debe fomentar la armonía entre los distintos grupos que la componen, del mismo modo, también entre los Estados es necesario proseguir, con sabiduría y valor, por el camino que conduce al verdadero progreso y a la libertad de los pueblos, abriendo itinerarios originales que tiendan a alcanzar acuerdos duraderos y a la paz. De este modo, se ahorrarán a los pueblos grandes sufrimientos y dolorosas heridas, difíciles de curar".
Durante la conferencia de prensa a bordo del avión papal, un periodista de la radio alemana ARD/BR-Radio le preguntó a Francisco sobre el conflicto de Nagorno Karabaj, y el Papa opinó que "el único camino es el diálogo sincero".
"Si no se puede llegar a esto se debe tener el coraje de ir a un tribunal internacional, a La Haya por ejemplo, y someterse al juicio internacional. No veo otra forma. Lo otro es la guerra, pero la guerra destruye siempre, con la guerra se pierde todo", declaró, según ACI Prensa.
En una columna en el New York Times, el periodista Jim Yardley remarcó que "Francisco no dijo nada sobre el tan criticado historial del gobierno de Azerbaiyán en libertades civiles, derechos humanos y elecciones justas. Grupos de derechos humanos han documentado numerosos abusos, como el encarcelamiento de periodistas y disidentes políticos, la inhabilitación de abogados de derechos humanos y la represión de los grupos de la sociedad civil".
Días antes de la visita de Francisco, una delegación de legisladores argentinos viajó para participar del V Foro Humanitario Internacional en Bakú, la capital azerí. La delegación estuvo encabezada por los diputados Patricia Giménez, vicepresidente segundo de la Cámara de Diputados, quien se reunió con las autoridades de Azerbaiyán, Myriam Juárez, Graciela Cousinet y Alejandro Ramos, junto con Juan de Dios Cincunegui, director de Relaciones Internacionales de la Cámara, José Néstor Ureta representando a la cancillería argentina y Rodolfo Pousá, director de Télam. "En todas las reuniones los acompañaron Rashad Aslanov, encargado de negocios de Azerbaiyán en Argentina y Carlos Dante Riva, el embajador Argentino en Bakú", informó Ámbito.