Escrito por Jorge Rachid
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Miércoles, 03 de Agosto de 2022 00:00 |
Como siempre se supo la expresión crisis responde a dos desafíos: peligro y oportunidad. Esa ecuación ha sido utilizada en forma reiterada por los países colonizadores sobre los países oprimidos, como herramienta de subordinación y ejecución de políticas antitéticas, a las necesidades y anhelos de los pueblos. Siendo la democracia política un instrumento de ordenamiento institucional, en el cual el voto avala las autoridades gubernamentales, en función de sus promesas y respaldos programáticos, sin embargo la avalancha de votos hacia una democracia social, siempre resultó lesiva a los intereses de las minorías dominantes, es decir de los verdaderos dueños del poder, aquellos a los cuales cualquier gobierno que no afecte sus intereses es recibido con beneplácito, pero en cuanto pretende dar respuestas a las demandas de las mayorías populares, es eyectado de su institucionalidad por medio de golpes de estado: parlamentarios, judiciales, financieros, militares, empresariales.
Es lo que las teorías políticas disecan como el comportamiento de las clases dominantes en la distribución de la riqueza, pero en ese sentido debemos decir que no sólo de marcos macro o micro económicos se mueve la política, sino de factores incidentales que van desde las emociones a las formaciones de sentido en la conciencia colectiva de los pueblos, que desde la irrupción del neoliberalismo como nueva colonialidad, en el mundo de la globalización, han sido bombardeados cotidianamente por medios hegemónicos, que dejaron de ser de comunicación para ser difusores y parte de las disputas de poder político de las clases dominantes, sujetas a los intereses imperiales. El mundo discute hoy la viabilidad democrática frente a los avances autoritarios de los mercados de capitales dominados por los fondos de inversión, llamados buitres, que han acaparado desde empresas multinacionales en sus carteras, hasta la mayoría de los medios de comunicación globales, que son dominantes en cada país. Así han sido arrasadas las democracias populares en múltiples países del mundo, al ser víctimas de los procesos de endeudamiento y pérdida de soberanía consecuente, que produce el sujetamiento económico deudor, a la toma de decisiones soberanas. Esa situación a la vez hizo reverdecer sectores políticos xenófobos, que han sido golpeados en sus sentimientos patrióticos, retrocediendo a sus formulaciones religiosas o primitivas, en especial en países centro-europeos. El Estado, esa configuración del equilibrio de poder que no se agota en la teoría de las relaciones sociales de producción, sino que se proyecta hacia las luchas por la hegemonía, que nunca es total desde el Estado, aunque siempre existen nichos y posibilidades de rupturas, irrupciones, transformaciones que van encadenando una serie de reformas en caso de Gobiernos populares, que existiendo voluntad política y planificación estratégica de objetivos comunes a los intereses del pueblo, “esas reformas en su tránsito, van constituyendo en sí una revolución” (Cacho El Kadre). Ese escenario inaugurado por el peronismo en el siglo pasado, conserva una vigencia filosófica, poco entendida por una dirigencia inundada por décadas de neoliberalismo, que ha bajado el piso de los derechos sociales en cada etapa que se hizo del poder. La respuesta es la Comunidad Organizada como hecho disrruptivo de las democracias liberales y burguesas, apropiadas por los sectores económicamente dominantes, cuando no tuteladas por países imperiales, como fue moneda corriente en los siglo XlX y XX. Es que la organización social del pueblo, como expresión del poder popular amparado constitucionalmente, transforma la democracia liberal política, representativa, en popular y participativa, algo insoportable para los dueños del poder. La crisis global que ahora es visualizada, en esta etapa pos pandémica, como una situación no sólo económica sino moral que coloca a la Humanidad en riesgo, ante el avance indiscriminado de un capitalismo voraz, brutal e inhumano, que la comunidad internacional había naturalizado hasta entonces, admitiendo las miles de muertes por hambre y por las guerras justificadas bajo las banderas hipócritas de libertad y democracia, con cientos de miles de muertes en países invadidos, por “la civilización occidental y cristiana”, tan occidental como Japón, tan cristiana como Israel en esa construcción de sentido de una minoría mundial dominante económica y militarmente. Es el ojo de la cerradura de la información por donde dos tercios de la Humanidad, no existe en el flujo diario de las noticias, prácticamente Eurasia ha desaparecido de lo cotidiano en la formación de la idea que conjugue la mirada de la vida, con la del mundo, que ha sido amputado en cuanto al conocimiento de los procesos que se desarrollan globalmente. La información de los medios es manipulada, ocultada, mentida ya que sólo refleja los intereses que representan. Poco se sabe o se tratan superficialmente aspectos centrales de la situación internacional de la hora, que al decir de Perón: “la política internacional es la verdadera política, el resto es cabotaje pueblerino”. Así son pocos conocidos los aspectos íntimos de los funcionamientos de otros tipos de Estado, que funcionan bajo el voto de su pueblo, pero en formas centralizadas en su contención política, pero amplias y contenedoras de las necesarias diferencias de miradas y subjetividades, que componen los pueblos. Múltiples ejemplos podríamos desplegar entre democracias parlamentarias, algunas monárquicas, de partidos único amplios, monarquías consolidadas bajo Parlamentos votados, Estados teocráticos con Parlamentos funcionales elegidos por voto popular. En todos los Estados está en discusión la democracia representativa moderna como forma de Gobierno. Pero tampoco se sabe demasiado del Banco Asiático de Infraestructura e Inversión creado el 2014 que cuenta hoy con 112 países miembros, ni se comenta de la Organización de Cooperación de Shangai que es una unión comercial de 2/3 de humanidad, ni se difunde la Ruta de la Seda en profundidad es su desarrollo estratégico, ni la ruta del Artico, ni del Stream l y ll gasoducto ruso alemán. La alianza ruso turco iraní sobre comercio en monedas locales y la protección de Siria ante el ataque occidental, es poco conocida como lo es la desvaloración del dólar como moneda de intercambio mundial, que explica el deterioro y debilidad actual de EEUU, que lo ha llevado a intentar generar guerras que ponen el riesgo al planeta. Los contratos a futuro de los mercados se están realizando en monedas locales, que incluyen a la libra esterlina, el yuan, el rublo y otras. No hay dudas que el escenario mundial está cambiando, como el regional, que ha recuperado las expresiones más progresistas del tiempo del UNASUR que intentó ser borrado del mapa, por el Imperio, creando una fracasada mesa del Grupo de Lima y una OEA patética a su servicio, que no sirvió a sus fines de dominación y coloniaje. Eso sucede porque la conciencia colectiva de los pueblos americanos es difícil de penetrar por la colonización anglosajona, que transcurre por carriles econométricos, cuando los pueblos latinoamericanos respiran por los caminos de la paz, la naturaleza y la protección de los seres humanos, como proclama Francisco, el Papa argentino, bloqueado por los medios, como es ocultado el conjunto de avances del peronismo en el Gobierno actual, que sido denigrado, atacado, golpeado, bloqueado y con intentos golpistas, que han transformado a la oposición política en enemigos del pueblo argentino, al que pusieron de rehenes de sus prácticas de odio. Entonces la ecuación sería que no hay democracia sin pueblo como actor principal, que la democracia representativa o participativa en términos institucionales, ha intentado mediar las representaciones populares, alejándolas del poder efectivo de la gestión, anulando de esta forma los objetivos estratégicos de los intereses de las mayorías. Peor aun cuando el Estado como tal ejerce su verticalidad natural, sin abrirse a la discusión de sus propuestas elaboradas en gabinetes cerrados que todo lo resuelven, como un laboratorio aséptico, sin participación de la Comunidad Organizada en sus múltiples expresiones, las organizaciones libres del pueblo, expresión auténtica de la vocación popular comunitaria. Ese hecho es lo que intenta diluir el neoliberalismo, al propugnar el individualismo egoísta frente a la solidaridad social activa, que se convocó en la Pandemia. Los desafíos de hoy en nuestra Argentina nos convoca a la militancia plena en la comunidad, venciendo la agenda del enemigo que intenta desde siempre, manejar la conciencia colectiva del pueblo a través de sus tanques informativos que promueven el odio, en pos de provocar el caos que permita denigrar al Estado como ejecutor, planificador y financiador de las políticas públicas, con el objetivo de posicionar el capitalismo financiero del Mercado como ordenar social. Por esa razón el peronismo, el movimiento obrero, los movimientos sociales y los derechos, la militancia social y política, son sus objetos del deseo en los ataques sistemáticos de las herramientas al servicio del coloniaje, respondiendo a los intereses de un Imperio en decadencia y sus aliados: EEUU. PRIMERO LA PATRIA - www.lapatriaestaprimero.org CABA, 2 de agosto de 2022 BIBLIOTECA Juan D. Perón: La Comunidad Organizada Ed. Codex Rafael Correa: La revolución ciudadana, el camino de Ecuador Ed. Punto final Nicolás Casullo: Las cuestiones Ed. FCE México
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